La realidad económica actual no es propicia para que los países alcancen los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), según se desprende de un estudio del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU (DESA) divulgado hoy.
La revisión de 70 años de análisis económico de DESA reveló que es necesario apoyar a los países con dificultades para que puedan afrontar la situación económica mundial e implementar la Agenda 2030.
Durante la presentación a la prensa del informe, Diana Alarcón, jefa de la Unidad de Monitoreo Económico Global de DESA, destacó el principal mensaje del documento.
“Las actuales condiciones globales no constituyen un entorno favorable para la implementación de una agenda tan ambiciosa como la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible, por lo que una mejor coordinación internacional es crucial para crear dicho entorno”, explicó.
Además, la consecución de los ODS precisa de instituciones sólidas que aceleren el crecimiento mundial, faciliten el flujo de bienes y servicios y apoyen el uso efectivo de recursos.
Del mismo modo, subrayó DESA, hace falta estabilidad en los sistemas monetarios y comerciales para impulsar el desarrollo, lo que implica alejarse del proteccionismo y de los sistemas de divisas únicas.
La revisión del trabajo de DESA mostró, por otra parte, que las recomendaciones que ha dado la ONU a los países en materia de libre comercio, políticas de desarrollo, y asesoría para situaciones nacionales específicas han sido certeras.