Aldana Vales / Washington (EFE).- El momento del año en el que ocurren las inundaciones en Europa ha cambiado, como muestra el desbordamiento anticipado o tardío de ríos en diferentes partes del Viejo Continente, según un estudio publicado hoy en la revista científica Science.
La investigación se basa en un análisis novedoso: el examen los patrones de los últimos 50 años en distintas regiones del continente, que vincula con los efectos del cambio climático.
Los resultados de la investigación, realizada por un equipo internacional, muestran que en las regiones del oeste y del noreste del continente, los ríos comienzan a desbordarse en forma anticipada, mientras que la temporada de inundaciones fluviales se demora alrededor del mar del Norte y en zonas de la costa mediterránea.
El estudio fue realizado por un equipo internacional de investigadores que se concentró en analizar el momento del año en el que ocurren las inundaciones, a diferencia de trabajos anteriores enfocados en la magnitud de los desbordes.
“Como las inundaciones también son producidas por los cambios en el uso de la tierra, como la deforestación, y en los cauces de los ríos, es difícil aislar los efectos del cambio climático si uno mira la magnitud de estos desbordes, que es lo que los investigadores han hecho antes”, explicó en una teleconferencia Günter Blöschl, uno de los autores del estudio.
El equipo de investigación compiló un conjunto de datos único de 4.262 estaciones hidrométricas de Europa, que midieron los niveles del agua de 38 países europeos entre 1960 y 2010.
“Es, de lejos, el conjunto de datos más completo que se haya compilado en Europa, lo que nos permitió ver patrones de los cambios en las inundaciones a escala continental”, aseguró Blöschl.
El equipo observó que, efectivamente, la temporada de inundaciones cambió en los últimos 50 años, pero este fenómeno se expresó de distintas formas en cada región, porque la temporada siempre varía según la zona de Europa.
Por ejemplo, en el noroeste del continente y en la zona del Mediterráneo suele suceder en invierno, cuando se combinan una menor evaporación e intensas precipitaciones, pero en el noreste ocurre en primavera, cuando empieza a derretirse la nieve del invierno.
“Esta nieve acumulada se derrite repentinamente y libera el agua rápidamente, lo que resulta en un gran desborde de los ríos”, explicó Berit Arheimer, otra de las autoras del estudio.