16 de octubre de 2017, Roma – El Papa Francisco pidió hoy la colaboración de los gobiernos de todo el mundo para hacer de la migración una opción más segura y voluntaria, subrayando que garantizar la seguridad alimentaria de la población requiere hacer frente al cambio climático y acabar con los conflictos. El Pontífice realizó este llamamiento en la ceremonia del Día Mundial de la Alimentación (DMA), que ha tenido lugar en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). El tema del DMA 2017 es: Cambiar el futuro de la migración. Invertir en seguridad alimentaria y desarrollo rural.
“Está claro que las guerras y el cambio climático son una de las causas del hambre, así que no presentemos el hambre como si se tratase de una enfermedad incurable”, señaló el Santo Padre durante su discurso inaugural en la ceremonia del DMA.
El Papa Francisco pidió un compromiso total con el desarme gradual y sistemático, e instó a un cambio en los estilos de vida, el uso de los recursos y la producción y el consumo de alimentos con el objetivo de proteger el planeta.
En referencia al desarrollo del Pacto mundial para una migración segura, regular y ordenada, el primer acuerdo de este tipo negociado por gobiernos bajo la supervisión de la ONU, afirmó que “la gestión de la movilidad humana requiere una acción intergubernamental coordinada y sistemática, alineada con las normas internacionales existentes, y repleta de amor e inteligencia”.
“Lo que está en juego –añadió- es la credibilidad de todo el sistema internacional”.
Al mismo tiempo aseguró que resulta desafortunado que “algunos” países se estén alejando del Acuerdo de París sobre el cambio climático.