(MADS). El sector ambiente desarrolló sus acciones y atiende las labores de mitigación del impacto ambiental causado por el atentado al oleoducto Caño Limón-Coveñas, que afectan la vereda Cañaguata, en Cubará en el departamento de Boyacá, y las veredas La Granada y Miramar en Saravena, Arauca.
Al respecto, el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Luis Gilberto Murillo, expresó su voz de rechazo ante estas acciones que van en contra del medioambiente y que afectan el bienestar de las comunidades: “Condenamos el atentado perpetrado al oleoducto Caño Limón Coveñas, los impactos siempre van a ser altos para la naturaleza, por cada barril que se derrama de petróleo nos contamina 1ha de suelos, el país no puede permitir que se atente contra los ecosistemas”.
Ecopetrol informó que se activó el Plan de contingencia dispuesto para estos casos y se trabaja de forma articulada con la autoridad ambiental, Corporinoquía y el municipio de cubará, como mecanismo preventivo a los posibles impactos ambientales causados por el atentado terrorista.
Entre las acciones que ya se han tomado para la atención de la emergencia están la contención del hidrocarburo derramado, en el municipio de Cubará se instala un punto de contención a 400 metros aguas abajo del sitio del evento, mediante diques en saco suelo y trinchos naturales. Se realizó recolección del suelo y material vegetal impregnado de hidrocarburo. Dicho material se encuentra almacenado actualmente en el Área de Almacenamiento Temporal de Suelos Aceitosos (ATSA) de Campo Velásquez. Se realizó reparación de la línea mediante la instalación de grapa para detener la fuga.
La Corporación Autónoma Regional Corporinoquía informó que luego de realizar sobre vuelvo por los sectores afectados, se determinó que hubo afectación de suelos y cobertura vegetal y no hubo afectación a cuerpos de agua.
Igualmente a la altura del municipio de Saravena se activó el plan de emergencia, igualmente no se presentan afectaciones a fuentes hídricas y se realizó la contención de hidrocarburo derramado.
Se recomienda a la comunidad mantenerse alejada de los sitios del evento para evitar que inhalen gases tóxicos.