Arboletes, Antioquia. Febrero 9 de 2018. (MADS). En un evento realizado en el norte del Urabá Antioqueño, en límites con el departamento de Córdoba, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible puso a disposición de autoridades ambientales e instituciones marítimas el Plan Maestro de Erosión Costera, un instrumento de política pública con alcance nacional, que busca garantizar el desarrollo de una estrategia intersectorial integral en la que se implemente un modelo de gobernanza y medidas de adaptación para enfrentar esta problemática a lo largo de las costas del país.
Colombia cuenta con una línea de costa de más de 3.500 kilómetros, de los cuales un 40% está siendo afectada por la erosión costera, que varía entre los 0,5 y 5 metros por año en diferentes regiones, trayendo consigo impactos para la población, la infraestructura y los ecosistemas marino-costeros.
Con el apoyo del Ministerio de Asuntos Económicos del Reino de los Países Bajos se conformó un Comité Técnico Nacional con la participación de la Dirección de Asuntos Marinos, Costeros y Recursos Acuáticos del Ministerio de Ambiente, el Servicio Geológico Colombiano y la Dirección Marítima (DIMAR) para evaluar las acciones estratégicas a implementar en cada una de las zonas afectadas por la erosión costera.
El ministro de Ambiente, Luis Gilberto Murillo, agradeció el apoyo recibido por parte de los Países Bajos y la asistencia técnica brindada por Corpourabá y la CVS, autoridades ambientales de la zona y destacó el trabajo de las entidades para controlar la erosión costera: “Este es un trabajo muy importante que se inició hace varios años y que estamos concluyendo con un mapa general de lo que está pasando en el país. Vamos a realizar pilotos en los departamentos de Córdoba y Antioquia con acciones en dos líneas, por una parte obras blandas, restauración y recuperación de ecosistemas y por otro lado, obras duras como espolones y otras infraestructuras.
A través de este Plan Maestro se identificaron 86 puntos críticos afectados por la erosión costera en todo el territorio nacional, 56 en la costa caribe, 20 en el pacífico y 10 en nuestras islas. Posteriormente se priorizaron los 20 lugares más críticos en 8 departamentos que son los que requieren una atención urgente.
“Este plan es un documento de visión y articulación que permite entender el problema y buscar una solución adecuada que nos aproxime a una zona costera resiliente y que incorpore las variables de cambio climático y los componentes económicos y sociales de cada territorio. Buscamos que sea posible tomar decisiones basadas en conocimientos que permitan prevenir y no pelear contra los fenómenos naturales, como muchas veces nos pasa, debemos construir con la naturaleza”, afirmó Andrea Ramírez, directora de Asuntos Marinos, Costeros y Recursos Acuáticos del Ministerio de Ambiente.
El fenómeno de la erosión costera pone en peligro los recursos naturales de las zonas litorales, tiene un impacto socioeconómico en el 1,7% de la población costera y afecta en 1,5 puntos el PIB, cifras que podrían superar los dos puntos para el 2030 según proyecciones de INVEMAR, de allí la importancia de las acciones que emprenda el país en este sentido.
Cabe resaltar que el Plan Maestro de Erosión Costera tiene en cuenta modelos de gobernanza aplicados a los territorios, pues además de los impactos físicos y ambientales se tuvieron en cuenta las repercusiones a nivel económico, social, cultural y de ordenamiento territorial que trae consigo la erosión costera. “Buscamos empoderar a las poblaciones locales para implementar acuerdos sobre el manejo de los recursos naturales y ejecutar estrategias de prevención y mitigación de riesgos asociados”, concluyó Murillo Urrutia.