Un gol de Gerard Moreno en el último minuto da una merecida victoria al Espanyol

El espanyolismo vivió una de sus noches más mágicas en el RCDE Stadium. Un gol de Gerard Moreno en el último suspiro dio la victoria al conjunto blanquiazul ante el R. Madrid en un partido emocionante y que acabó con una justa victoria del Espanyol. Los blanquiazules fueron de menos a más y acabaron imponiéndose al conjunto entrenado por Zinedine Zidane, que apenas inquietó la portería de Diego López. El gol del pichichi perico fue el colofón a una gran noche blanquiazul.

En su búsqueda por encontrar el mejor once y recuperar las señas de identidad que dieron éxito la pasada temporada, el entrenador blanquiazul, Quique Sánchez Flores volvió a hacer cambios en su once inicial. Marc Navarro recuperó la titularidad en el lateral derecho, Víctor Sánchez regresó al centro del campo y Sergio García ocupó la punta de ataque junto a Gerard. El R. Madrid, por su parte, salió con un once condicionado por las bajas, pero con futbolistas de mucha calidad como Bale o los exblanquiazules Lucas o Asensio.

El conjunto espanyolista entendió que la fórmula para lograr un resultado positivo era ceder el dominio del esférico y tratar de sorprender en alguna acción a la contra. La realidad es que la posesión fue claramente visitante en los primeros compases del choque y los de Zidane pronto amenazaron con un remate de cabeza de Bale que Diego López solventó con una gran intervención. El gallego volvió a ser providencial poco después al despejar a córner un centro envenenado de Isco. El Espanyol, que no acababa de crear juego, se mantuvo en el partido gracias a las buenas intervenciones del portero blanquiazul.

Los locales se conectaron al encuentro gracias a un error del R. Madrid. Carlos Sánchez cortó un mal despeje visitante y la pelota llegó a Gerard que, solo ante Navas, no pudo marcar. El delantero catalán vio como el tico despejaba su chut con la pierna aunque el árbitro no señaló el consiguiente córner. El ‘7’ blanquiazul fue protagonista poco después en otra jugada que acabó en gol, pero que el árbitro anuló por un fuera de juego muy justo. El Espanyol fue perdiendo la timidez y cada vez era más capaz de crear peligro ante un Real Madrid que, antes del descanso, sólo se acercó en un par de ocasiones que acabaron con sendos remates de Isco.

El arranque del segundo tiempo fue claramente blanquiazul. El Espanyol pisó el área de Navas con frecuencia y poniendo en más de un apuro a Navas. El portero visitante estuvo atento para despejar a córner un chut sin ángulo de Sergio García y luego vio como el larguero se aliaba con él para repeler un cabezazo de Óscar Duarte. Siguió insistiendo el conjunto perico que convirtió a Navas en el mejor jugador visitante. El portero tuvo que esforzarse en dos remates de Gerard y Víctor Sánchez que bien podrían haber acabado en gol de coger un poco más de fuerza. Tampoco estuvo aburrido Diego López que intervino en un par de contras de los blancos.

El partido se equilibró aunque el Espanyol no perdió la portería contraria de vista y siguió apurando sus opciones de lograr la victoria. La grada creyó en el triunfo y empujó a su equipo en los minutos finales en los que emergió la figura de Sergio García. El de Bon Pastor asistió primero a Gerard que casi marcó con un remate de cabeza muy forzado y, a continuación, buscó sorprender con un chut con la izquierda. Gerard, en los últimos minutos del partido, pudo anotar, pero su remate salió rozando el palo de Navas. La insistencia tuvo su premio y Gerard, en el último suspiró, conectó un disparo que superó al portero costarricense.  Gol, locura en la grada y tres puntos para un Espanyol que mereció el triunfo.

 

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