A 23 días de la fuga de petróleo en el pozo 158 de La Lizama, la Procuraduría General de la Nación citó al Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Luis Gilberto Murillo Urrutia; a la Directora de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, Anla, Claudia Victoria González Hernández, y al Presidente de Ecopetrol, Felipe Bayón Pardo, para buscar una salida a la crisis ambiental que generó este incidente en Santander.
De igual forma, el ente de control pidió a la Anla ordenar a la petrolera suspender las actividades de exploración y explotación en el área, iniciar en la zona acciones para atender el incidente que ha afectado gravemente la fauna y la flora, y realizar estudios que determinen la razón técnica y científica de la emanación de crudo y otras sustancias.
Adicionalmente, la Procuraduría le solicitó un informe detallado de las medidas preventivas iniciadas por Ecopetrol para detener los afloramientos de hidrocarburos en la zona de La Lizama y sus alrededores.
El órgano de control también requirió una relación de las afectaciones a la salud de las comunidades vecinas y de los impactos ambientales al paisaje, los suelos, recursos hídricos y el aire, que se han identificado hasta el momento por la emanación del crudo, e información sobre qué labores de rescate de fauna silvestre están realizando.
El Ministerio Público requirió, igualmente, un informe para establecer si las medidas para atender la emergencia estaban contenidas en el Plan de Contingencia presentado por Ecopetrol y si han sido suficientes para mitigar y prevenir el impacto ambiental causado por la emanación del crudo.
Anla exige a Ecopetrol reforzar medidas de manejo
La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, Anla, ordenó una indagación preliminar en materia ambiental y exigió a Ecopetrol S.A. para “que de forma inmediata adopte las medidas de control y manejo ambiental” ante la contingencia que se viene presentando en la vereda La Fortuna, de Barrancabermeja, tras el afloramiento de petróleo en el pozo La Lizama.
Además, la entidad ordenó una indagación preliminar en materia ambiental.
Claudia Victoria González Hernández, directora de la Anla, explicó que las medidas de manejo buscan una recolección y limpieza más eficiente en la zona afectada, así como el incremento de equipos para controlar la fuente de la contingencia, con el fin de que no aumente la contaminación de los cuerpos de agua.
La funcionaria agregó que la entidad pidió a la empresa información para determinar las causas del incidente, reportes para adelantar la evaluación de la afectación y definir un plan de recuperación, además de otros datos para establecer el estado de la calidad del aire e información sobre la relación de los pozos ubicados de la zona.
El incumplimiento de las obligaciones establecidas por parte de la estatal petrolera, según la Anla, llevarían a sanciones que sean aplicables y que contra lo establecido en el auto administrativo no procede recurso alguno.
La Anla aseguró que un informe técnico presentado por Ecopetrol el pasado 21 de marzo, evidencia que aunque el pozo 158 se encuentra inactivo, existen varios pozos contiguos al área afectada que están presuntamente activos, “circunstancia por la cual se hace imperioso determinar con claridad, si los hechos acaecidos correspondieron a un caso fortuito o fuerza mayor, o sí por el contrario correspondieron a posibles errores operacionales que presuntamente produjeron un impacto ambiental negativo, cuyos efectos y recuperabilidad serán analizados por esta Autoridad en su momento oportuno”, reseña la Anla.
vanguardia.com