La Ciudad de México activó hoy la fase uno de contingencia ambiental por ozono, por primera vez este año, debido a las condiciones desfavorables para su dispersión, informó la Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came).
La primera fase de contingencia estará vigente desde hoy, jueves, y su aplicación supone sacar de la circulación diaria cerca de 1,5 millones de automóviles, equivalentes al 30 % del parque de vehículos de la zona metropolitana de la capital mexicana.
En el programa de control de vehículos participan también los Estados de México, Hidalgo, Morelos, Puebla y Tlaxcala, que junto con la Ciudad de México integran la Came.
La decisión de decretar la emergencia fue tomada al registrarse 161 puntos de ozono en el Índice de Calidad del Aire, 11 puntos más que el máximo permitido, en una estación de vigilancia del sureste de la capital mexicana, indicó la Comisión.
El pronóstico del tiempo del jueves indica que se mantendrán las condiciones desfavorables para la dispersión de contaminantes, como son viento débil, estabilidad atmosférica, altas temperaturas y mayor radiación solar, agregó.
Esta es la primera emergencia del año 2018 en la zona metropolitana de la capital mexicana, después de que en mayo del 2017 las medidas de contingencia se aplicaron durante seis días de manera consecutiva.
La industria debe bajar sus emisiones del 30 al 40 %
Además de restringir la circulación de autos, la Came recomendó a las personas con problemas respiratorios quedarse en interiores en las horas de mayor temperatura, suspendió actividades deportivas, culturales y cívicas en las escuelas.
Las autoridades sugirieron limitar la actividad deportiva al aire libre, y también establecieron restricciones al transporte de carga, de reparto de combustibles, y ordenó a la industria que emita precursores de ozono, bajar sus emisiones del 30 al 40 %.
Las autoridades de tránsito adoptarán medidas para agilizar la circulación, el gobierno suspenderá los trabajos de pavimentación y reparación de calles, entre otras.
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) agregó diversas recomendaciones como la de reforzar los cuidados de personas con enfermedades crónicas, no fumar ni exponerse al humo de cigarro.
Los vehículos que circulan en la capital, unos 5 millones, están considerados la mayor fuente de las 5.000 toneladas de contaminantes del aire que cada día se emiten en Ciudad de México, de acuerdo con el Sistema de Monitoreo Atmosférico.
Informes oficiales de la calidad del aire para la Ciudad de México señalan que entre 1986 y 2016 ha disminuido la contaminación atmosférica pero las concentraciones aún superan los límites permisibles. EFEverde