La Carta del G7 sobre Plásticos es bienvenida, pero todos necesitamos hacer mucho más, no sólo en cuanto a los desechos de ese material, sino respecto a todos los problemas de los océanos, dijo hoy el Secretario General de la ONU en La Malbaie, Quebec, donde se dan cita este año los líderes de las siete economías más desarrolladas del mundo.
En un evento especial sobre el tema, celebrado en el marco de la Cumbre del G7, António Guterres advirtió que la seguridad y el futuro colectivo están en riesgo y apeló a los mandatarios a reforzar la batalla para salvar el medio ambiente.
“Si no protegemos nuestros mares y océanos y si no ganamos la batalla contra el cambio climático, todos los supuestos en los que basamos nuestras políticas serán inútiles”, dijo.
Medidas urgentes
Impulsada por el Gobierno de Canadá, la Carta del G7 sobre Plásticos tiene la meta de que el 100% de los empaquetados sean reutilizables, reciclables o convertibles en composta.
Guterres recordó que, de no tomar medidas urgentes, para 2050 habrá más basura plástica que peces en los océanos. Agregó que los hechos son claros y que el mundo se encuentra frente a una emergencia global.
“Los desperdicios plásticos se encuentran ahora en las áreas más remotas del planeta. Matan la vida marina y hacen un daño enorme a las comunidades que dependen de la pesca y el turismo”, subrayó.
En este contexto, indicó que en el Pacífico flota una masa plástica más grande que Francia.
“No se equivoquen, estamos en medio de una batalla y estamos perdiendo en todos los frentes”, alertó.
Plan de contingencia
El Secretario General dibujó un escenario de peces y ecosistemas muertos debido a la pesca excesiva, la contaminación y la basura no tratada que se tira en el mar.
Por si fuera poco, tenemos los impactos cada vez mayores del cambio climático, abundó.
“Afortunadamente, tenemos un plan de batalla”, acotó Guterres.
Ese plan son los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), detalló, en particular el número 14, que entre sus diez metas contempla combatir la contaminación y acidificación marina, poner fin a la sobreexplotación pesquera y proteger los ecosistemas.
El titular de la ONU sostuvo que, si bien la Conferencia sobre los Océanos celebrada el año pasado obtuvo más de 1.300 compromisos, ninguna de las iniciativas y declaraciones tendrá sentido a menos que se acepte la magnitud del problema.
“Por eso estoy aquí hoy. Para sonar la alarma e inyectar un sentido de emergencia en sus deliberaciones y decisiones”, puntualizó, llamando a los mandatarios de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Estados Unidos y el Reino Unido a ejercer su liderazgo.
Guterres hizo notar que si no se protegen los océanos se perderá la batalla contra el cambio climático.
“Tomen con seriedad estas amenazas a nuestro medio ambiente global y entiendan que nuestro futuro y seguridad colectivos están en riesgo”, concluyó el Secretario General.