• Venció 4-2 a Croacia en una emocionante final
  • Marcaron Griezmann, Pogba, Mbappé y Mandzukic en contra

Francia es la campeona de la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018™. Derrotó 4-2 a Croacia en una final muy entretenida, disputada en el estadio Luzhnikí de Moscú, y puso el broche de oro a un torneo extraordinario.

A pesar de que Croacia dominó el balón en los primeros compases del partido, Francia se adelantó en una jugada fortuita. Antoine Griezmann botó un libre indirecto desde el costado derecho del ataque francés, y Mario Mandzukic peinó la pelota con tanta mala suerte que acabó introduciéndola en su propia portería.

Ivan Perisic empató con un buen disparo desde el borde del área, pero el atacante pasó de héroe a villano en apenas unos minutos. Francia centró un balón desde la derecha y el zurdo tocó el esférico con la mano. Después de consultar con el VAR, el colegiado indicó pena máxima y Francia volvió a ponerse por delante en el marcador.

Tras el paso por vestuarios, Francia aumentó su ventaja gracias a Paul Pogba, cuyas actuaciones a lo largo del torneo merecían ser recompensadas con un gol en la final. Después de que Kylian Mbappé ganara un pase en profundidad, Griezmann le cedió el balón a Pogba, quien anotó tras un primer intento fallido.

Mbappé, que desgastó a los defensores croatas con su trabajo incansable, merecía también un gol. Y así ocurrió: su disparo desde el borde del área se coló junto al poste derecho de la meta de Danijel Subasic, que no pudo hacer nada por evitarlo.

Mandzukic volvió a marcar en la misma portería, pero esta vez a favor de Croacia tras un error de Hugo Lloris. Pero Les Bleus emularon a sus ídolos de 1998 —incluido el seleccionador, Didier Deschamps— y conquistaron su segundo título mundialista.

El análisis de los enviados especiales de FIFA.com

Adrien Gingold, con Francia (Síguelo en Twitter)

Croacia jugó mejor, pero Francia fue mucho más eficaz. Y quizá también más inteligente. La gran virtud de Les Bleus fue exactamente esa: independientemente de quién fuera su rival, los galos acabaron encontrando la solución para batir a sus adversarios, uno tras otro. Sin desplegar un juego brillante, el combinado francés marcó cuatro goles, lo que da una idea de su nivel, pero también del nivel de su seleccionador. Gracias a su disposición táctica, Didier Deschamps le ganó la partida a Zlatko Dalic.

Vjekoslav Paun, con Croacia (Síguelo en Twitter)

Adiós al sueño de Croacia. Si bien controló el balón, el cuadro croata no supo traducir ese dominio en jugadas peligrosas contra el arco de Hugo Lloris. Francia fue mejor, ya que aprovechó todas sus ocasiones y no cometió demasiados errores de gravedad. En cualquier caso, los jugadores croatas son ya unos héroes en su patria y han inscrito su nombre en los anales futbolísticos de su país.

Jugador Budweiser del Partido

Antoine Griezmann demostró unos nervios de acero a la hora de convertir el penal en la primera mitad del encuentro. El gol inicial de los franceses también nació de sus botas, y el delantero fue una amenaza constante para la defensa croata.

El dato

60 – Son los años que habían pasado desde que alguien más joven que Kylian Mbappé (19) marcó por última vez en una final de la Copa Mundial. Un tal Pelé anotó contra Suecia en 1958 cuando apenas tenía 17 años. La de Rusia 2018 fue, además, la final con más goles al cabo de 90 minutos desde la de Suecia 1958.

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