Geraint Thomas se convirtió en el primer maillot amarillo de la historia que se impone en una etapa en línea con meta en el Alpe d’Huez, rematando el enorme trabajo de un Team Sky excelso y frustrando la larguísima fuga del neerlandés Steven Kruijswijk (LottoNL – Jumbo), héroe y ciclista más combativo de la jornada. El galés superó a Tom Dumoulin (Team Sunweb), a Romain Bardet (Ag2r La Mondiale) y a su coequipier y campeón saliente Chris Froome en el sprint final para confirmar su primera posición en la general provisional del Tour de Francia 2018.
161 ciclistas tomaron la salida en la duodécima etapa del Tour de Francia a las 12:24 desde Bourg-Saint-Maurice. Cuatro bajas: Mark Cavendish, Mark Renshaw (Team Dimension Data) y Marcel Kittel (Katusha – Alpecin), que llegaron fuera de control de ayer; y Rigoberto Urán (EF Education First), que se retiró por no sentirse recuperado de las caídas sufridas en la novena etapa. No hubo forma de que se configurase una fuga en los 30 primeros kilómetros por una pendiente favorable que provocaba un ritmo de carrera elevadísimo.
Un Movistar Team muy ofensivo
El panorama cambió en el Col de La Madeleine (HC, -122km). Desde las primeras estribaciones se sucedieron los ataques, con un Movistar Team especialmente protagonista que tensó con Marc Soler y amenazó con Nairo Quintana antes de introducir a Andrey Amador y Alejandro Valverde en una escapada de 30 corredores entre los cuales estaban el 6º de la general, Steven Kruijswijk (LottoNL – Jumbo), y otros contendientes al podio como Rafal Majka (Bora – Hansgrohe); Jesper Hansen (Astana Pro Team) o Ilnur Zakarin (Katusha – Alpecin). Team Sky quiso contener la escapada, pero terminó por dejar crecer su ventaja ante el peligro de desarbolarse.
La machada de Kruijswsijk
Alaphilippe pasó en primer lugar por el Col de La Madeleine (HC, -122km) para renovar su liderato en la clasificación de la Montaña. No obstante un ataque de Pierre Rolland (EF Education First) en los Lacets de Montvernier (2ª, -92,5km), el demarraje más espectacular de la jornada estaba por llegar. Descontento con el ritmo de la escapada, Steven Kruijswijk (LottoNL – Jumbo) atacó a los pocos kilómetros de comenzar la ascensión la Croix de Fer (HC, -54,5km) para marcharse en solitario y comenzar su exhibición. No sólo dejó sin respuesta a sus potentes compañeros de escapada, sino que llegó a construir una renta de 6’10” sobre el pelotón, donde el trabajo de Team Sky fue complementado en el tercio final de esta ascensión por Movistar Team y Ag2r La Mondiale. El altísimo ritmo y la acumulación de esfuerzos pasó factura, con casi una decena de abandonos entre los cuales se incluyen ciclistas como Fernando Gaviria (Quick-Step Floors) y Dylan Groenewegen (LottoNL – Jumbo), ganadores de etapa en esta edición de la Grande Boucle.
Emoción en Alpe d’Huez
Coronado el penúltimo coloso del día, los ciclistas de Team Sky recuperaron las primeras posiciones del pelotón en el tramo de llano que llevaba hasta el pie de Alpe d’Huez. Ahí recortaron dos minutos a Kruijswijk, que se dejó los otros cuatro en la emocionante subida a Alpe d’Huez. Fueron varios los que intentaron romper el ritmo de Team Sky, impuesto por Egan Bernal: Nairo Quintana (Movistar Team), Vincenzo Nibali (Astana Pro Team)… Sólo lo consiguió Romain Bardet (Ag2r La Mondiale), que se marchó solo y obligó a reaccionar en primera persona al maillot amarillo Geraint Thomas y a Chris Froome para, junto a Tom Dumoulin (Team Sunweb) y Mikel Landa (Movistar Team), formar el quinteto que rebasaría a Kruijswijk para jugarse el triunfo en meta.