No pudo empezar mejor el partido para el equipo de Ernesto Valverde, que tras un minuto y medio ya contaba con ventaja en el marcador al aprovechar Coutinho una salida fallida de Lloris después de un excelente pase en profundidad de Messi para Jordi Alba.
Con el 0-1 en el marcador, el Tottenham se puso a trabajar para busar el empate. Buscó con insistencia la espalda de Semedo y los balones a Lucas Moura, pero el Barça no estaba incómodo saliendo a la contra aunque las llegadas claras tardaron en llegar en ambas áreas.
Pero a la media hora de juego Messi, Suárez y Coutinho trazaron una preciosa jugada que desembocó en un balón suelto en la frontal del área. El croata Ivan Rakitić no se lo pensó y con un derechazo impresionante dobló la ventaja visitante en Wembley.
Para entonces Messi manejaba el partido. El argentino tenía el día, tocaba entre líneas, apoyaba arriba, venía a recibir… Si Pochettino tenía un plan para parar a su compatriota no le estaba funcionando.
Y la segunda parte comenzó igual. Messi mandó un balón al palo nada más reanudarse el partido para desesperación de la afición de un Tottenham que no aprovechó el descanso para cambiar piezas pese a que en el primer acto fue claramente superado por el Barça. Cinco minutos después, el argentino volvió a sacarse un zurdazo con efecto para impactar de nuevo contra la madera del marco de Hugo Lloris.
Sin embargo, en la siguiente jugada recortó distancias en el Tottenham. Contra rápida bien llevada por Lamela, pase del argentino para Harry Kane y el inglés rompe la cadera a Semedo para batir a Ter Stegen con un remate seco al palo lejano.
El tanto inglés podría haber resucitado el partido, pero Messi no estaba por la labor. A la tercera fue la vencida y tras una jugada clásica del rosarino abriendo a Jordi Alba, se internó en el área del Tottenham para rematar el centro del lateral de L’Hospitalet con un timing perfecto.
Con el 1-3, y pese a faltar media hora de partido, el Tottenham pareció bajar los brazos. Pero la suerte esta vez le sonrió y un disparo aparentemente inofensivo de Lamela se envenenó tras tocar en un defensa y se convirtió en el 2-3 en el minuto 66. Había partido.
Lo intentó el Tottenham en los últimos minutos con todo. Saltaron al campo Fernando Llorente y Moussa Sissoko para buscar el empate a la desesperada, pero al final lo que llegó fue la sentencia obra de Messi ya casi en el tiempo de descuento.
Datos clave
- El Barça cumple 300 partidos en Copa de Europa/UEFA Champions League
- Piqué disputó su partido número 100 en la #UCL
- El gol de Rakitić fue el número 600 del Barcelona en Copa de Europa/UEFA Champions League
- Messi ha marcado 22 goles en 29 partidos ante clubes ingleses