Real Madrid no pudo prolongar en Éibar la racha que llevaba de cuatro victorias consecutivas. El encuentro comenzó de manera vibrante y a un ritmo endiablado. La primera ocasión llegó en el minuto 3. Disparo lejano de volea de Kike García y Courtois tocó el esférico lo justo para que impactase en el poste. Dos minutos más tarde respondió Bale, pero su golazo en un remate lejano fue anulado por fuera de juego.
Las ocasiones se sucedían y el Real Madrid estuvo muy cerca de adelantarse en el 11’. Centró Asensio, controló Benzema para deshacerse de Ramis y posteriormente picó el balón con el pie izquierdo para superar a Riesgo. Cote salvó a su equipo sobre la línea de gol. Cinco minutos después se adelantó el Éibar en un contragolpe. Courtois rechazó el disparo de Kike García en el área pequeña pero Ceballos no tuvo suerte en el despeje y, tras golpear en Escalante, el balón acabó en la red. El tanto subió al marcador tras una consulta con el VAR.
Decisivo inicio de segunda parte
Tocaba remontar y el partido se pudo marchar empatado al descanso, pero Riesgo realizó una gran parada al lanzamiento de falta de Baleen el 35’. Tras el paso por los vestuarios, todo se complicó más. Cucurella robó el esférico a Odriozola, que se lesionó en la jugada, y lo cedió a Enrich, quien batió a Courtois de disparo cruzado en el 52’. Cuatro minutos más tarde volvieron a marcar los locales. Kike García fue el autor del gol.
Los blancos lo intentaron hasta el final, sobre todo con un disparo de Benzema que se marchó cruzado en el 70’. El Real Madrid ya piensa en el partido de Champions League del próximo martes ante la Roma en el estadio Olímpico.
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