El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha confirmado la designación de Andrew Wheeler, un defensor de la industria del carbón, como titular de la Agencia de Protección Ambiental (EPA), ente dedicado a preservar el medio ambiente.

Wheeler llevaba desde julio del año pasado dirigiendo de manera interina ese departamento, y ya en noviembre Trump anunció que pensaba hacer permanente su designación.

El nombramiento de Wheeler, que deberá ser confirmado por el Senado, coincide con el cierre parcial que afecta a la administración gubernamental desde hace 19 días y que mantiene suspendidos muchos de los servicios de la EPA.

Un nombramiento que desmonta el legado ecologista de la anterior administración

“Me siento honrado y agradecido de que el presidente Trump me haya nombrado para dirigir la EPA (…) Para mí, no hay mayor responsabilidad que proteger la salud humana y el medio ambiente”, dijo el propio nominado en una declaración.

Wheeler tomó en julio pasado las riendas de la EPA de manera interina cuando el anterior jefe de medio ambiente, Scott Pruitt, renunció a su cargo tras ser acusado de numerosas irregularidades.

Bajo su mando, la EPA anunció el pasado agosto una propuesta de normativa que facilitaría la eliminación de regulaciones sobre las emisiones de las centrales térmicas de carbón, una nueva medida de Trump para deshacer el legado de su predecesor, Barack Obama, en materia de lucha contra el cambio climático.

Es probable que Wheeler sea confirmado en el cargo por el Senado, que el año pasado ya lo refrendó como “número dos” de la EPA, aunque por un estrecho margen de votos.

Los grupos ecologistas estadounidenses, en contra 

Sin embargo, se prevé que su nombramiento suscite un fuerte debate debido a su trabajo en el pasado para una de las principales compañías de carbón del país, Murray Energy, así como para empresas mineras y grupos de presión a favor de los combustibles fósiles.

La noticia fue recibida con fuertes críticas de los grupos ambientalistas, que consideran que es un peldaño más en la escalera de Trump para desmontar las políticas de protección ambiental existentes y a favor de los sectores que niegan el cambio climático.

“El liderazgo de Wheeler en la EPA sería una continuación del peligroso enfoque forjado por su predecesor, Scott Pruitt”, afirmó en una declaración el presidente del Fondo de Defensa Medioambiental (EDF), Fred Krupp, que indicó que Estados Unidos “necesita un Administrador de EPA guiado por la ciencia, que respete nuestras leyes ambientales y valore la salud pública”.

Durante su trayectoria en la EPA, “Wheeler ignoró la ciencia y atacó los cimientos de la protección ambiental”, agregó Krupp, que citó una norma que limita la emisión de mercurio y otros componentes tóxicos por parte de las centrales eléctricas del país. EFEverde