Todo o nada. Así reza la divisa del Bayern a partir de ahora en la Liga de Campeones de la UEFA. Este martes por la noche el Bayern disputará el partido de ida de los octavos de final en casa del Liverpool FC, finalista en la pasada edición de la UCL. El objetivo de Niko Kovac y sus hombre es lograr un resultado positivo en el legendario Anfield, de modo que en la vuelta el 13 de marzo en el Allianz Arena se consume el pase a la siguiente fase.
«Somos conscientes del ambiente y el fantástico estadio que nos espera. Por eso mismo tenemos que jugar con la sangre caliente y la cabeza fría», indicó el director deportivo del club, Hasan Salihamidzic, antes de tomar junto a la plantilla un vuelo hacia la ciudad inglesa. «Se trata de un partido que podría ser una semifinal. Será un duelo al más alto nivel, estoy expectante».
Dos empates del Bayern en Anfield
El Bayern viaja a Inglaterra con una racha de ocho partidos a domicilio consecutivos sin perder, en los que anotó al menos dos goles por encuentro. «Siempre es importante marcar fuera de casa; estaría muy bien si lo logramos también esta vez», señaló Salihamidzic, que confía en el poder ofensivo del Bayern. Sin embargo, nunca antes un equipo alemán ha vencido en Anfield, con 15 derrotas en 18 visitas germanas a este coliseo. El FCB logró dos empates sin goles en 1971 y 1981.
«Todos podemos estar contentos de que vayamos a tener un partido tan fantástico», expresó Kovac, que es consciente de que el Liverpool, colíder de la Premier League, no le pondrá las cosas fáciles. «Ha sido el sorteo más complicado de los que nos podían tocar. El Liverpool llegó a la final el año pasado, son favoritos claros al título. Pero nosotros somos el FC Bayern München y estoy convencido de que ellos son conscientes de que luego les toca jugar en Múnich».
Dudas en ambas escuadras
«Viajamos a Liverpool con sana confianza en nosotros mismos. Queremos que nuestros chicos hagan un buen partido y, si es posible, afrontar el partido de vuelta con el respaldo de un buen resultado aquí», declaró Leon Goretzka. «Con los partidos ante el Liverpool podemos dar un golpe de efecto y dejar claro que se tiene que contar con nosotros otra vez», avanzó Niklas Süle. Su compañero Mats Hummels avisó del peligro del rival. «Es un equipo realmente bueno. Hay que pelear los 90 minutos, si no uno acaba perdiendo o abajo en el marcador».
El Bayern no se ha librado de las bajas para la cita en Liverpool. Thomas Müller es baja por sanción, Jérôme Boateng sufre un virus estomacal y Kingsley Coman arrastra un golpe desde el partido de Bundesliga en Augsburgo. «Ha mejorado un poco», informó Salihamidzic. Su participación en el partido se decidirá el mismo día. «Todavía tenemos 36 horas, veremos cómo se desarrolla».
Klopp espera una gran noche de Liga de Campeones
Tampoco viajó con la expedición Franck Ribéry, cuya mujer dio a luz en la noche del domingo al lunes, el quinto hijo de la preja. El galo viajó por la tarde a Liverpool y se unió a sus compañeros a última hora de la tarde. Corentin Tolisso no se ha recuperado todavía de su rotura de ligamentos cruzados, de modo que, al igual que Arjen Robben, no llega a tiempo para el partido.
En el LFC también tienen que afrontar varias bajas. El eje de la zaga red Virgil van Dijk cumple sanción por acumulación de amarillas. Giorgino Wijnaldum, Xherdan Shaqiri y Dejan Lovren son dudas, Joe Gómez está lesionado.
El entrenador del Liverpool, el alemán Jürgen Klopp, espera «una gran noche de Liga de Campeones, un partido emocionante que queremos disfrutar», expresó el lunes, consciente de lo que le aguarda a su equipo. «Tenemos que estar concetrados al 100 por 100, si no, no tendremos ninguna opción, eso está muy claro».