The Blues took an early lead through Sergio Aguero’s 24th goal of the campaign and seemed to be coasting towards victory until the hosts struck back with two penalties before the break.

But despite losing Nicolas Otamendi for a second bookable foul midway through the second period, City fought back magnificently with two late goals – the first a stunning free-kick from Leroy Sane and the winner on 90 minutes a clever finish from Raheem Sterling.

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What happened?

With the VELTINS-Arena packed and a partisan home crowd in great voice, the scene was set for a memorable afternoon of European football.

Manchester City line-up against Schalke in the UEFA Champions League

Let battle commence….

City’s first ­­attempt on goal was an intricate set-piece that ended with David Silva crossing and Sergio Aguero seeing a header tipped over by Ralf Fährmann.

In fact, there was a veritable feast of free-kick and corner variations in the first 15 minutes, but the Blues’ opening goal was down to good old-fashioned anticipation and reading of the game.

As Schalke worked the ball back to their keeper, Silva was quicker to react to his short pass to the edge of the box and he stole in, slipped the ball to Aguero who made no mistake from six yards.

There was a minute or so before the goal was confirmed by VAR – but the next time it would be used it would be the Blues who suffered.

The next major talking point didn’t come until the 33rd-minute when a shot from the edge of the box by Daniel Caligiuri was deflected around the post by Otamendi.

The Schalke players immediately claimed handball, the decision was referred to VAR and after a five-minute delay, the referee awarded a penalty.

Otamendi was booked and as a result, misses the return leg andNabil Bentaleb sent Ederson the wrong way to level the scores.

But if that seemed harsh, on the stroke of half-time the referee awarded a second penalty for the Germans as Fernandinho was judged to have pulled down Salif Sane as a free-kick was lofted into the box.

It again was harsh on the Blues, and more so as Bentaleb again beat Ederson from the spot and the booking Fernandinho received as a result means he will also be banned for the return leg.

What had been a very comfortable evening had been turned on its head in the space of 10 controversial minutes.

City started the second period with Kevin De Bruyne whistling a low shot a foot wide and then a smart move between Silva and Aguero was only denied by a fine Matija Nastasic tackle as Kun was about to pull the trigger.

El Mago

Industry from the skipper

But Schalke were resolute and organised and the Blues were struggling to get their through their defensive ranks.

Things got worse for City on 68 minutes when Otamendi was booked for the second time for a foul on Burgstaller and reduced to ten men for the last 20 minutes or so.

But instead of Schalke tightening their grip on the game, the Blues fought back magnificently.

Sub Leroy Sane levelled the scores on 84 minutes with a blistering 25-yard free-kick to silence the home fans and seemingly give City a priceless draw – but there was more to come.

Ederson – is there a better goalkeeper in world football? – passed the ball fully 70 yards into the path of Sterling who held off his marker before slotting home with a clever shot past Fährmann.

It was breathless stuff from a team who never know when they’re beaten, and it gives City a fantastic chance of progressing to the last eight of the competition – though on this evidence there is still plenty of hard work to do.

mancity.com

Los Blues tomaron una ventaja temprana a través del gol número 24 de la campaña de Sergio Agüero y parecían estar avanzando hacia la victoria hasta que los anfitriones respondieron con dos penalizaciones antes del descanso.

Pero a pesar de perder a Nicolas Otamendi por una segunda falta que se puede reservar a mitad del segundo período, City se defendió magníficamente con dos goles finales: el primero fue un impresionante tiro libre de Leroy Sane y el ganador en 90 minutos, un inteligente final de Raheem Sterling.

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¿Que pasó?
Con el VELTINS-Arena lleno y una multitud partidaria en el hogar con gran voz, la escena se preparó para una tarde memorable de fútbol europeo.

La alineación del Manchester City ante el Schalke en la UEFA Champions League. Que comience la batalla …
Que comience la batalla …
 

El primer intento de City en el gol fue un intrincado set de piezas que terminó con el cruce de David Silva y Sergio Agüero al ver un cabezazo volcado por Ralf Fährmann.

De hecho, hubo un verdadero festín de variaciones de tiros libres y esquinas en los primeros 15 minutos, pero el objetivo de apertura de los Blues se debió a la anticipación y la lectura del juego.

Cuando Schalke devolvió el balón a su portero, Silva reaccionó más rápido a su pase corto hacia el borde de la caja y entró, deslizó el balón hacia Agüero, quien no cometió ningún error desde seis yardas.

Hubo un minuto más o menos antes de que VAR confirmara el gol, pero la próxima vez que se usara serían los Blues los que sufrieron.

El siguiente punto de conversación importante no llegó hasta el minuto 33, cuando un disparo desde el borde del área por Daniel Caligiuri fue desviado alrededor del poste por Otamendi.

Los jugadores de Schalke inmediatamente reclamaron el balonmano, la decisión se remitió a VAR y, tras un retraso de cinco minutos, el árbitro otorgó una penalización.

Otamendi fue reservado y, como resultado, pierde el tramo de vuelta y Nabil Bentaleb envió a Ederson de la manera incorrecta para nivelar las puntuaciones.

Pero si eso parecía duro, en el medio tiempo el árbitro otorgó una segunda penalización para los alemanes, ya que se juzgó que Fernandinho derribó a Salif Sane cuando se lanzó un tiro libre hacia el área.

Otra vez fue duro para los Blues, y más aún cuando Bentaleb volvió a vencer a Ederson desde el punto y la reserva que recibió Fernandinho como resultado significa que también será expulsado para el partido de vuelta.

Lo que había sido una velada muy cómoda se había convertido en un espacio de 10 minutos controvertidos.

City comenzó el segundo período con Kevin De Bruyne silbando un tiro bajo de un pie de ancho y luego un movimiento inteligente entre Silva y Agüero solo fue negado por un excelente tackle de Matija Nastasic cuando Kun estaba a punto de apretar el gatillo.

El Mago Industria desde el patrón.
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Pero Schalke estaba resuelto y organizado y los Blues estaban luchando para superar sus filas defensivas.

Las cosas empeoraron para el City en 68 minutos cuando Otamendi fue reservado por segunda vez por una falta en Burgstaller y reducido a diez hombres durante los últimos 20 minutos aproximadamente.

Pero en lugar de que Schalke apretara más el juego, los Blues se defendieron magníficamente.

Sub Leroy Sane empató los puntajes en 84 minutos con un amonestador tiro libre de 25 yardas para silenciar a los fanáticos locales y aparentemente darle a City un empate sin precio, pero había más por venir.

Ederson: ¿hay un mejor portero en el fútbol mundial? – pasó el balón por completo a 70 yardas en el camino de Sterling, quien mantuvo fuera de su marcador antes de ubicarse en casa con un inteligente disparo más allá de Fährmann.

Un equipo que nunca supo cuándo fueron derrotados fue algo que lo dejó sin aliento, y le da a la Ciudad una oportunidad fantástica de progresar a los últimos ocho partidos de la competencia, aunque en esta evidencia todavía hay mucho trabajo por hacer.