Agencia de Noticias UN- Personal con formación para la atención de turistas, reconocimiento de las necesidades de la región, preservación de la seguridad y alianzas estratégicas con medios de comunicación son las iniciativas de la U.N. para posicionar el turismo sostenible en Chocó.
Un estudio adelantado por la Institución presenta un diagnóstico de debilidades que incluye escasez de personal en el sector, alta burocracia, insuficiencia presupuestal en la Corporación de Turismo del Chocó, inseguridad y vías deterioradas.
Gustavo Alberto Correa Arias, administrador de empresas y estudiante de la Maestría en Administración de la U.N., asegura que por esa razón formularon recomendaciones como alianzas estratégicas, campañas de sensibilización y generación de ingresos para el incentivo del turismo en la región.
La investigación se denomina “Estrategias de mercadeo para el posicionamientos del turismo sostenible en el departamento del Chocó” y fue asesorada por el profesor Diego Germán Arango, ingeniero y psicólogo de la U.N.
Para su desarrollo incluyó una metodología descriptiva y aplicada en trabajo de campo, por medio de entrevistas y cuestionarios, dirigidos a agencias de viajes de Quibdó y a 184 turistas que visitaron este destino.
“La idea fue, con un componente integral, realizar un estudio de mercado para determinar las facilidades que se ofrecen a los 120.000 visitantes que llegan a la región cada año, los aspectos que les atraen de la zona y la calidad en la atención recibida”, explica el estudiante.
Asimismo, se investigaron las festividades de la región, sobre todo la Fiesta de San Pacho, celebrada en homenaje a San Francisco de Asís y declarada Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad, hecho que la convierte en un atractivo potencial.
Se identificaron aspectos negativos como la alta participación burocrática en las entidades del Estado, donde personas que ocupan cargos no cumplen con los perfiles requeridos.
La falta de infraestructura vial tiene al departamento con la mayoría de sus vías en mal estado, como la vía Quibdó-Pereira que solo tiene 40 kilómetros pavimentados.