En la próxima ronda medirá a Alcaraz.

En el desierto se sobrevive. Y Rafa Nadal lo ha dejado otra vez muy claro en el BNP Paribas Open. Reaccionando desde un 3-5 en la primera manga y superando bastantes adversidades en el decisivo, el español se ha impuesto en cuartos de final ante el australiano Nick Kyrgios con parciales de 7-6(0), 5-7, 6-4, para así firmar una nueva remontada durante esta edición del primer ATP Masters 1000 de la temporada.

Ya había celebrado en segunda ronda a pesar de estar 2-5 en el tercer set ante Sebastian Korda. Además, estuvo quiebre abajo en el primer set ante Daniel Evans, así como con Reilly Opelka en el segundo set. En todos sus duelos en Indian Wells ha escapado, y este jueves no hubo excepción. Pero valió la pena el esfuerzo: ahora tiene récord de 19-0 en una de las temporadas más espectaculares de su carrera.

Nadal estaba buscando por segunda vez en su carrera llegar a 19 victorias consecutivas en pistas rápidas en el ATP Tour (alcanzó 30 entre Miami 2012 y Pekín 2013), para así firmar su segunda mejor rancha en esta superficie. Y al enfrentarse ante un jugador en su segundo torneo del año y que estaba buscando su primer avance a unas semifinales ATP desde 2019, se podía pronosticar una nueva alegría para el español.

Pero también era cierto que al frente de la pista estaba un jugador que en el torneo no había sufrido quiebres ni perdido sets. Y el australiano, actual No. 132 del Ranking ATP y el cuartofinalista con peor ranking desde Ivo Karlovic en 2011, llevó su inspiración en la semana en el desierto a su noveno enfrentamiento con Nadal. Por eso el diestro de 26 años llegó a sacar para el primer set en el 5-4.

¿Qué cambió en ese momento? Rafa soltó el brazo, como quien no tiene mucho que perder. Es cierto que por ese riesgo cometió su séptimo error no forzado del partido. Pero también conectó dos tiros ganadores en el mismo game por primera vez en el encuentro. Su valentía tuvo resultados: recuperó el quiebre y terminó llevando el parcial a un tie-break en el que jugó a la perfección. Incluso se anotó un ace, uno de los cinco de la manga, para ponerse en ventaja.

La segunda manga tuvo muchísimos menos altibajos. De hecho, no hubo oportunidades de quiebre sino hasta el 6-5 cuando sacaba el balear, quien nada pudo hacer para evitar que Kyrgios quebrara por segunda vez en el encuentro y lo llevara a un set decisivo. Una vez allí, la emoción creció con dos break points para Kyrgios cuando este ganaba 1-0, y otros dos para Nadal en el 2-2, game que se llevó Nick con tres aces consecutivos.

Luego de las oportunidades desperdiciadas de ambos lados, el primer quiebre de la manga llegó en el 3-3 y fue gracias a una doble falta que favoreció al zurdo de 35 años. A partir de allí, el campeón en Melbourne, Australia y Acapulco este año no dejó escapar la inercia y marchó seguro camino a sus primeras semifinales en Indian Wells desde 2019.

Con este resultado, luego de dos horas y 46 minutos de intensa batalla, Nadal deja en 6-3 su historial ATP HeadToHead con Kyrgios y llega a récord de 11-1 en cuartos de final del BNP Paribas Open, y de 76-21 en esta ronda en torneos ATP Masters 1000. El sábado intentará clasificar a su quinta final de este evento cuando enfrente a su compatriota Carlos Alcaraz, quien más tarde en la jornada venció 6-4, 6-3 al británico Cameron Norrie.

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