El británico remonta en cinco mangas a Kokkinakis

Andy Murray fue puesto contra las cuerdas y respondió con el alma, remontando el partido más largo de su carrera para alcanzar la tercera ronda del Abierto de Australia. En una noche para la historia, sumergido en las profundidades de la madrugada, el británico exhibió el carácter indomable que le llevó a tomar la cima del deporte.

En un pulso que finalizó a las 4.04 de la madrugada, el antiguo No. 1 mundial superó al local Thanasi Kokkinakis por 4-6, 6-7(4), 7-6(5), 6-3, 7-5 para avanzar tras cinco horas y 45 minutos de gesta. Fue un ejemplo de perseverancia, firmeza ante los obstáculos y una tenacidad a prueba de balas. El triunfo de un jugador diferente que no entendió de límites sobre la cancha.

Ante una enfervorecida grada que abarrotó la Margaret Court Arena, Murray exhibió su fortaleza física y mental por segunda vez en la semana, después de superar a Matteo Berrettini en un pulso agónico de cuatro horas y 52 minutos en la primera ronda. El británico llegó a levantar un 2-5 en el tercer set para aferrarse al partido, antes de combatir con dureza en la cuarta y quinta mangas para firmar una remontada para la historia.

«Ha sido increíble poder remontarlo», dijo Murray. «Thanasi estaba sacando a un nivel increíble y golpeando con mucha fuerza su derecha. No sé cómo he logrado superarlo. Comencé a jugar mejor con el paso del partido. Tengo un gran corazón».

«Ahora soy el jugador con más partidos ganados estando dos sets abajo», subrayó el cinco veces finalista de Melbourne, acostumbrado a batallas que cortan el aliento. «Lo he logrado antes, tengo experiencia. Me apoyo en esa experiencia y en la voluntad. La lucha, el amor por el deporte y el respeto que siento por este torneo y la competición es lo que me mantiene en pie».

El encuentro sirvió para exhibir la capacidad de supervivencia de Murray, un auténtico coloso contra las cuerdas. El británico acumula un total de 11 partidos ganados durante su carrera tras entregar las dos primeras mangas. Ningún otro jugador en activo firma una cifra semejante.

En un partido vibrante, Kokkinakis aprovechó su condición local para volar arropado por el público. El australiano dibujó un partido repleto de agresividad que rompió la contención de Murray, colocándose con dos mangas y 5-2 en el tercer parcial hasta rozar su primer billete a la tercera ronda del torneo. Sin embargo, al otro lado de la red esperaba un jugador de condiciones especiales.

Ni sus 35 años, ni una cadera de titanio, ni siquiera el desgaste del debut ante Berrettini, apartaron el alma guerrera de Murray de la lucha por el partido. El británico fue tomando el control del partido con el paso de las horas, haciendo retroceder a Kokkinakis en un pulso por dominar la línea de fondo.

Ningún punto ilustró las capacidades de Murray como el firmado con 0-2 al inicio del tercer set. El británico se parapetó junto al muro de esquina a esquina, empleando cada músculo para responder a tres remates de Kokkinakis hasta que el australiano estrelló una derecha contra la red. Señalando su sien tras atrapar un punto imposible, Murray arrojó una premonición del partido que estaba por desplegar.

Su capacidad de resistencia le permitió devorar los nervios de Kokkinakis en el desempate de la tercera manga y lanzarse a por un triunfo impensable en la madurez de la madrugada. Cuando el reloj superó las 4.00am, Murray había maniatado a un rival supremo, maniatado por la fortaleza de su defensa e impresionado por su capacidad de supervivencia.

Murray añadía así un capítulo brillante a una historia escrita con letras de oro en el primer Grand Slam del año, donde firmó cinco finales a lo largo de su carrera. El británico, que ostenta un balance de 51-14 en Melbourne, no alcanza la cuarta ronda de un major desde 2017, cuando pisó los cuartos de final de Wimbledon.

Ahora, el horizonte ofrece otro desafío mayúsculo en su camino. El sábado deberá enfrentar al español Roberto Bautista Agut, otro referente de tenacidad, que también remontó dos mangas para sobrevivir al invitado Brandon Holt por 4-6, 2-6, 6-3, 6-2, 6-2 este jueves.

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