Madrid.- Las cápsulas usadas de café también se pueden reciclar y “si los ciudadanos colaboran, nuestro compromiso es darles una segunda vida” a través del sistema sin ánimo de lucro Circularcaps, ha explicado su presidente Alberto Vega durante uno de los foros de Diálogos EFE dedicado a este tipo de reciclaje.
La entidad, heredera del sistema diseñado en 2010 por la empresa Nestlé, lo ha reorganizado para hacerlo “sectorial, colectivo y grande” y agrupar a 25 empresas, “más del 80 % de las del sector”, que dan servicio a 42 millones de personas en España “en toda la Península, Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla”.
El proceso más complicado fue “crear la estructura, los estatutos, el reglamento de régimen interior…, porque estamos todos los productores y comercializadores: grandes, medianos y pequeños” pero, una vez puesto en marcha, Circularcaps está creciendo con rapidez ya que “en un año y medio hemos pasado de tener 2400 puntos de recogida a más de 5300” con acuerdos municipales y con distribuidores de alimentación y “ya hemos gestionado más de 5 millones de kilos de cápsulas”.
Según datos de la Asociación Española del Café los españoles consumen 3,8 kilos por habitante y año, una cantidad media, ya que otros países como los escandinavos están por encima de los 11 kilos.
“El consumo de cápsulas ha sido lo más emocionante que le ha ocurrido al sector en los últimos quince o veinte años”, indica Vega, “pero tenía que venir acompañado de una solución medioambiental” con la colaboración de los usuarios, que pueden reciclarlas a nivel doméstico o bien en los contenedores instalados en distintos puntos, señalizados en la web lascapsulassereciclan.com.
Posos de café, aluminio y plástico
Los residuos allí depositados son recogidos y tratados por Tradebe, cuyo responsable de sostenibilidad para España, Francia e Italia, Josep Pujol, ha indicado que “hay una idea falsa y es que en España hacemos las cosas peor que en los países vecinos” cuando, en reciclaje y “según los datos fríos, lo estamos haciendo como mínimo igual y, en determinadas cosas, incluso mejor”.
Las cápsulas son tratadas según lleven aluminio o plástico: el primero es un material infinitamente reciclable y, una vez limpio, se usa en fundiciones nacionales, mientras que el segundo requiere “procesos más complejos” para obtener unas granzas, “básicamente unas lentejas de plástico”, que, mezcladas con producto virgen, le dan también una segunda vida como mobiliario urbano, mochilas, etc.
Sin embargo, más del 90 % de la cápsula se compone del poso de café y agua y, de ese porcentaje, es posible recuperar hasta un 85 % en forma de “fertilizante natural, no químico, mejor que otros y que sirve para abonar campos”.
Pujol define este trabajo como “un proyecto bonito, con una larga tradición de éxito” para reciclar unos materiales que, si no, irían a vertedero.
Más proyectos de sostenibilidad
Además de Circularcaps, Nestlé España está involucrada en otros proyectos ambientales, ha precisado su responsable de sostenibilidad, Jordi Aycart, incluyendo la reducción de la huella de carbono y el impulso a la circularidad.
La compañía trabaja en “cuatro patas fundamentales: reducción de gases de efecto invernadero, uso responsable del agua y promoción de la biodiversidad, mejoras del embalaje y divulgación y concienciación a nivel interno como externo.
El ecodiseño se revela como una ayuda importante y, así, por ejemplo, “entre 2019 y 2020 hemos logrado reducir en un 20 % la cantidad de plástico” de unas cápsulas que inicialmente eran de color negro y, ahora, son marrones “porque las plantas de reciclaje no identificaban bien el color tan oscuro y así facilitamos su tarea”.
Entre otros ejemplos, Aycart ha indicado que un 96 % del embalaje de la empresa está ya diseñado para ser reciclado.
Reciclar en Madrid
En el foro también ha intervenido el concejal del Ayuntamiento de Madrid y delegado de Limpieza y Zonas Verdes José Antonio Martínez Páramo, quien se ha felicitado por la colaboración púbico privada, que ayuda a la concienciación del ciudadano teniendo en cuenta además que el Real Decreto de la Ley de Envases y Residuos de 2022 no considera envase las cápsulas por ser un residuo muy pequeño y “mucha gente lo tira a la fracción resto, cuando se puede reciclar”.
Así lo muestra el hecho de que en 2021 se depositaron 70 000 kilos en cápsulas en los contenedores madrileños y en 2022 está cantidad aumentó hasta los 80 000.
Martínez Páramo ha destacado que en Madrid “en 2014 se reciclaba más o menos el 24 % de los residuos y, a día de hoy, estamos cerca del 40 %” por lo que, “aunque queda un largo camino, estamos trabajando bien”.
“Todo lo que sea mejorar la normativa para mejorar la sostenibilidad es bueno”, pero el concejal considera que “la principal herramienta es la concienciación, primer paso para la acción”.
Esta edición de Diálogos Efe ha sido moderada por Pedro Pablo G. May, periodista de Efeverde, la plataforma multiformato de información medioambiental de la Agencia EFE. EFEverde.