Madrid, 23 may (EFEverde) .- Diversas ciudades españolas acogerán entre el 31 de mayo y el 1 de junio el «colillatón» o maratón internacional de recogida de colillas de cigarrillos impulsado a nivel global por la ONG Surf Rider

La industria del tabaco no solo afecta a la salud humana, sino que daña los ecosistemas a través de la deforestación y la contaminación del suelo y el agua, argumenta la oenegé en un comunicado en el que recuerda que cada año se arrojan alrededor de 4.500 mil millones de colillas de cigarrillos en el suelo que,  con el viento o la lluvia,  son arrastradas hacia los desagües o cursos de agua antes de terminar en el océano.  Se estima que un 40% de estas  colillas terminan en el mar, detallan.

Mediante la campaña Colillatón, voluntarios en Asturias, Cataluña, Galicia, Islas Baleares, Madrid, País Vasco y Valencia recogerán colillas en diferentes playas, lagos, ríos y ciudades españolas.

 “Las colillas son el residuo que más encontramos en nuestras costas. En el año 2022, hemos recogido 487 062 colillas durante las Ocean Initiatives, un programa de voluntariado ambiental de Surfrider Foundation.  Sabiendo que una colilla contamina hasta 500 litros de agua, es urgente tomar medidas para evitar que estos residuos acaban en las playas”,  refieren en su comunicado.

Daños a la salud humana y ambiental

A propósito del Día Mundial Sin Tabaco, el próximo 31 de mayo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) se enfoca en el impacto ambiental de los cigarrillos a través de un informe titulado «Tabaco: envenenando nuestro planeta»

“La nicotina de una colilla de cigarrillo puede esparcirse en solo 24 horas y contaminar hasta 1.000 litros de agua. Esta contaminación a gran escala tiene consecuencias para la vida marina, ya que se encuentra con un verdadero cóctel de componentes químicos”, señala la ONG Surf Rider.

Contaminación por plásticos: los filtros están compuestos de acetato de celulosa. Cuando llegan al océano se degradan en micro y nano partículas de plástico que ya no podrán recogerse.

Contaminación química: una vez consumido el cigarrillo, el filtro libera más de 7.000 sustancias tóxicas tales como arsénico, mercurio, amoníaco, plomo y nicotina. Cuando las colillas llegan al océano tienen un impacto directo en los ecosistemas marinos. Perjudican a la fauna y la flora, envenenando los ecosistemas marinos. Estos contaminantes pueden inhibir el crecimiento de las plantas marinas y liberar suficientes toxinas para causar una tasa de mortalidad del 50% en los peces en 96 horas. También se encuentran en el 70% de las aves marinas. 

En España hay más de 500 playas ‘libres de humo’, una iniciativa aplaudida por la Oficina Regional en Europa de la OMS y con la Ley 7/2022 de 8 de abril los Ayuntamientos se podrá limitar la posibilidad de fumar en las playas y sancionar a los ciudadanos que incumplan las ordenanzas municipales, aunque son pocos los ayuntamientos que lo hagan.  

“La lucha contra la contaminación por colillas de cigarrillos en nuestras playas es un esfuerzo conjunto que requiere acciones tanto a nivel gubernamental como comunitario. La responsabilidad no solo recae en los individuos, sino también en los productores de tabaco, quienes deben asumir la responsabilidad financiera de limpiar y prevenir la contaminación por sus productos», afirma Xavi Curto, Coordinador de Surf Rider España. EFEverde