LOS ÁNGELES — En solo cuatro meses con los Dodgers, Shohei Ohtani ya ha dado su buena cuota de jonrones majestuosos. Pero reservó el más impresionante para su 30mo bambinazo de la temporada la noche del domingo durante la victoria por 9-6 contra los Medias Rojas.
El derecho de Boston, Kutter Crawford, le dejó una recta cortada en cuenta de 2-1 en el centro del plato en el quinto inning, y Ohtani se aseguró de hacerlo pagar. Tan pronto como Ohtani hizo contacto, no había duda de que iba a ser un cuadrangular. La única pregunta era si la pelota saldría del Dodger Stadium.
Ohtani casi logró sacarla completamente del estadio, pero sí la pasó completamente sobre el pabellón entre el jardín derecho y el central, con la bola rebotando hasta la plaza del center field. El batazo, con una distancia proyectada de 473 pies, es el segundo más largo conectado en el Dodger Stadium en la Era Statcast (desde 2015), solo detrás de uno de 475 pies de Giancarlo Stanton que sí salió del parque el 12 de mayo de 2015.
La superestrella de los Dodgers ahora tiene siete jonrones de más de 450 pies esta campaña, la mayor cantidad entre cualquier jugador en las Grandes Ligas, y tres más que cualquier otro Dodger en una sola temporada desde 2015. Ohtani es ahora el dueño de tres de los cinco vuelacercas más largos en el Dodger Stadium en la Era Statcast.
Ohtani ha sido incluso mejor de lo anunciado en su primera temporada con los Dodgers, después de firmar un histórico contrato de 10 años y US$700 millones en el invierno. Lidera a los Dodgers en casi todas las categorías de bateo importantes y ahora ha dado al menos 30 jonrones en cuatro temporadas consecutivas.
En poco tiempo, los Dodgers se han acostumbrado a ver a Ohtani conectar bambinazos descomunales. Pero cuando la cámara enfocó al dugout de los Dodgers, quedó claro que fue uno de los más impresionantes en la historia del Dodger Stadium.
mlb.com