Lo mejor de las carreras sin grandes superestrellas es que hay más espacio para todos, y cada ciclista puede atreverse a soñar con algo grande. Il Giro d’Abruzzo 2025 es una de esas carreras, ya que la falta de un claro favorito significa que cada etapa trae consigo gratas sorpresas.

La Etapa Reina nos ofreció la subida a Roccaraso, más concretamente al Piano d’Aremogna. Una subida lo suficientemente larga como para requerir un ritmo cuidadoso, una sincronización precisa y la fuerza para aguantar hasta la cima a 1.590 metros. Si a eso le sumamos la lluvia fría y las temperaturas de 5 °C (sensación térmica), el resultado fue una etapa propicia para las sorpresas. No era descabellado que surgiera un nuevo nombre, pero lo que nos encontramos fue un completo desconocido para el público general, un ciclista que nunca había conseguido una victoria UCI, ni siquiera en categorías inferiores. Ese atleta es Edison Callejas, un colombiano de 24 años que aún espera ser descubierto, nacido a 2.640 metros sobre el nivel del mar en Bogotá.

El ciclista del Petrolike le dio a su equipo la victoria más prestigiosa de su historia, atacando a 11 km de la cima y abriendo rápidamente una ventaja de más de 40 segundos sobre sus rivales. ¡Y no se equivoquen! No se enfrentaba a un equipo de segunda categoría. Detrás de él estaban dos profesionales experimentados como David De La Cruz (Q36.5) y Georg Zimmermann (Intermarché–Wanty), quien se aseguró el maillot de líder del BiancoVerdeBlu con su segundo puesto, además de dos escaladores jóvenes y talentosos como Pablo Torres (UAE Team Emirates–XRG), subcampeón tanto en el Tour de l’Avenir como en el Giro Next Gen del año pasado, y Mathys Rondel (Tudor), cuarto en este último. Incluso dándolo todo, estos ciclistas no pudieron acercarse al sorprendente Callejas, quien, podemos afirmar con seguridad, tendrá muchos admiradores siguiéndolo de cerca a partir de ahora.

Mañana llega la que probablemente sea la etapa más fácil del Giro de Abruzzo 2025. El nuevo líder, Zimmermann, podrá centrarse en defender su posición, vigilando de cerca las bonificaciones de tiempo, mientras que el resto buscará ascender en la general o ir a por todas para ganar la final frente al Santuario de San Gabriele en la Isola del Gran Sasso.

ilgirodabruzzo.it