SAN FRANCISCO (AP) Anthony Edwards lanzó un triple desde 9 metros justo antes de la bocina del medio tiempo, y su triple le dio a Minnesota el impulso que necesitaba, algo que aprovechó al máximo hasta un tercer cuarto dominante.

Edwards también habló con su equipo en el descanso, y Chris Finch atribuyó esa charla motivadora a la decisión de marcar el ritmo antes de una impresionante segunda mitad.

«En el descanso, el entrenador entró y dijo que jugábamos como si ya hubiéramos ganado la serie, y no me gusta», dijo Edwards, y añadió: «Les dije que solo teníamos dos victorias».

Edwards anotó 30 puntos, Julius Randle 31 y los Timberwolves vencieron a los Golden State Warriors por 117-110 el lunes por la noche, poniendo 3-1 arriba en su serie de playoffs de la Conferencia Oeste.

Mantenerse cerca al descanso fue clave.

“Fue crucial porque parecía uno de esos partidos en los que nos costaría encontrar el ritmo”, dijo Finch. “Pensé que podríamos ir perdiendo por ocho o diez al descanso con la forma en que habíamos jugado. Afortunadamente, su tiro lo igualó bastante, y si salíamos con la determinación necesaria, sentí que estaríamos bien”.

Ahora, los Wolves regresan a casa, a Minneapolis, con la oportunidad de asegurar la serie de semifinales al mejor de siete de la Conferencia Oeste en el quinto partido el miércoles por la noche.

Los Warriors seguirán sin Stephen Curry, quien se perdió su tercer partido consecutivo y tiene programada una reevaluación de su lesión en el isquiotibial izquierdo ese día.

“No vamos a intentar superar esto”, dijo Draymond Green. “Si está en condiciones de jugar, estoy seguro de que lo hará”.

Edwards encestó triples consecutivos y anotó 11 puntos en una decisiva racha de 17-0 para Minnesota que puso a los Timberwolves arriba 85-68 al final del tercer cuarto. Llegaron al último cuarto con una ventaja de 97-77 y los Warriors no pudieron remontar.

Edwards, que venía de una actuación de 36 puntos en el tercer partido, encestó ese potente tiro que acercó a Minnesota a 60-58 al descanso. Y los Wolves volvieron a brillar en la segunda mitad, tras ir perdiendo por dos puntos al descanso, en una victoria por 102-97 en el tercer partido.

Jonathan Kuminga salió del banquillo para anotar 23 puntos y convertir 11 de 12 tiros libres para los Warriors, tras su actuación de 30 puntos en el tercer partido con otra joya.

Jaden McDaniels añadió 10 puntos y 13 rebotes para Minnesota.

Buddy Hield cayó brevemente 4:17 antes del descanso después de que McDaniels lo agarró del cuello y le jaló la espalda de la camiseta. La jugada pasó a revisión mientras los aficionados coreaban «¡No puedes hacer eso!», pero se consideró falta común en lugar de flagrante.

Golden State ha perdido tres partidos seguidos desde que Curry se lesionó la pierna al principio del primer partido el martes por la noche.

Los Warriors tardaron en poner en marcha su ataque y su tiro de tres puntos en la derrota por 102-97 del sábado, y la situación fue similar en este partido.

Jimmy Butler y Green anotaron 14 puntos cada uno y Hield 13.

Incluso sin Curry, el plan defensivo de Finch se centró en evitar que los Warriors lanzaran sus peligrosas ráfagas de triples, y Golden State terminó con 8 de 27 en triples.


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