Las naciones del mundo se reúnen este lunes en París para alcanzar un nuevo acuerdo universal sobre el cambio climático, conocedoras de que ya ha habido una respuesta nacional casi universal, con planes de acción climática para lograr retos a largo plazo.
En la víspera de la conferencia COP21, más de 180 países cubriendo casi el 95% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero han entregado sus planes nacionales de acción climática a la Secretaría de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC).
Otra señal sin precedentes de la voluntad política mundial para alcanzar un acuerdo, es la visita de 150 Jefes de Estado y Gobierno a París para dar su apoyo público el lunes, el mayor grupo de líderes que jamás ha asistido a un evento de la ONU en un solo día.
Los planes nacionales y la llegada de los líderes también reflejan la creciente confianza de los gobiernos en la respuesta mundial de decenas de miles de empresas en el mundo, inversores y miles de alcaldes y gobiernos regionales que han anunciado su compromiso en la transformación económica y social esencial para avanzar en un camino hacia un futuro bajo en emisiones de carbono, crecimiento y desarrollo sostenible.
Esta enorme y satisfactoria recopilación de respuestas mundiales de todos los niveles de gobiernos, empresas e inversores hará posible que el mundo pueda lograr el objetivo de que el aumento de la temperatura de este siglo permanezca por debajo de los 2 grados centígrados, la línea de defensa acordada internacionalmente contra los peores impactos del cambio climático.
El trabajo central de los gobiernos es capturar el impulso abrumador en el acuerdo internacional que contribuye a una ambición mayor con el tiempo y anima a los países a cooperar en sus propios intereses nacionales para hacer una transición más rápida hacia un futuro bajo en carbono que mantendrá al mundo por debajo de los 2 grados centígrados.