La lectura siempre es positiva. Pocos jugadores en el circuito son capaces de detectar sus problemas en la pista y encontrar el antídoto para combatirlos durante el transcurso de un partido. Este es el caso de Rafael Nadal, que superó a un inspirado Andrey Kuznetsov por 6-3, 5-7, 6-4, tras más de dos horas de partido. “Ganar partidos a tres sets es una muy buena noticia y algo muy positivo”, reconoce el español después de sellar el pase a las semifinales en el Qatar Exxonmobil Open.

Lo cierto es que Nadal ha encadenado tres victorias en este comienzo de temporada en las que ha tenido que cerrar el encuentro a tres mangas (ante Carreño y Kuznetsov). El balear extrae conclusiones positivas: “Principalmente uno tiene que estar preparado para poder analizar y poder dar un giro al partido, cosa que creo que a día de hoy estoy preparado. Ya lo estuve al final del año pasado, donde gané varios partidos en tres sets ajustados. Creo que es algo que he hecho bien durante toda mi carrera, sin embargo el año pasado en ese sentido no tuve la opción de poder analizar, poder luchar y dar ese giro al partido de la manera en la que me hubiera gustado”.

Ahora, de la final sólo le separa Illya Marchenko, que después de dar la sorpresa en la primera ronda ante David Ferrer –defensor del título– ha mantenido su estado de gracia frente a Teymuraz Gabashvili y Jeremy Chardy. “Lo he visto jugar durante esta semana. Está jugando fantástico. En el partido frente a David [Ferrer] estuvo genial, y hoy frente a Jeremy [Chardy] jugó increíble también. Está con mucha confianza, así que será un gran reto para mí mañana y espero estar listo para afrontarlo”. Este viernes, Nadal busca su primera final de 2016 en el ATP World Tour.