James Rodríguez e Isco Alarcón pueden tener sus días contados en el Real Madrid. Ahora mismo son dos de los futbolistas más cuestionados desde las altas esferas del club por bajo rendimiento. No se duda de su calidad técnica, que la tienen y mucha, sino de su compromiso. Ambos jugadores, considerados de forma unánime como dos de los más capacitados a nivel técnico de la plantilla junto a Marcelo, van a pasar un examen durante los 13 partidos (podrían ser hasta 18) que le restan al conjunto blanco. En esos tres meses que quedan hasta que la temporada finalice el 28 de mayo con la disputa de la final de la Champions en Milán se va a decidir el futuro de James e Isco. Pero a raíz de la crisis abierta tras el derbi y la pérdida definitiva de toda opción en la Liga, hoy ambos tienen la consideración de transferibles. En su mano está revertir la situación, aseguran desde el club, donde no esconden que se sienten defraudados con su actitud.
Según informa el diario ‘ABC’ en su edición de este martes, James Rodríguez deberá pagar 10.400 euros por desobedecer a la Policía, que mandó parar al colombiano cuando conducía a 200 kilómetros por hora camino del entrenamiento del Real Madrid el pasado 1 de enero.Se trata de la multa máxima prevista por infracción grave. James todavía tiene pendiente otra sanción, ya que al colombiano se le abrieron dos procesos. El penal, por un presunto delito contra la Seguridad del Tráfico, sigue pendiente.