Gales y Eslovaquia debutaban en una fase final del Campeonato de Europa de la UEFA y la selección de Chris Coleman se llevó los tres puntos gracias al 2-1 que abrió el Grupo B de la UEFA EURO 2016.

Gareth Bale adelantó a los suyos a los diez minutos, Duda igualó a 29 del final y el espigado Hal Robson-Kanu provocó el delirio de los galeses en el 81′ al empujar de forma poco ortodoxa un balón suelto tras una gran jugada de de Aaron Ramsey.

En una sensación extraña para ambos, galeses y eslovacos saltaron al Stade de Bordeaux para escuchar por primera vez su himno nacional en un marco incomporable como una fase final del máximo torneo continental.

Avisó primero Marek Hamšík tras romper a dos defensas con un recorte y soltar el disparo con la zurda, pero Danny Ward (que fue el titular por la baja de última hora de Wayne Hennessey) desvió a saque de esquina.
En el minuto 10, Gareth Bale ensayó un libre directo y el meta Matúš Kozáčik dio un paso a la izquierda que evitó la posible parada. El futbolista del Real Madrid volvía a escena tras la final de la UEFA Champions League liderando a Gales.

El propio Bale tuvo otra en el tiempo añadido, pero su zurdazo acabó mansamente en las manos de Kozáčik. Eslovaquia dio un paso adelante y ya en el segundo acto llegó el empate. Ondrej Duda entró en el minuto 60 y uno después no desaprovechó la excepcional jugada de Róbert Mak por la derecha.
Coleman, cuando el partido pintaba mal, optó por dar entrada al espigado Robson-Kanu. En el 73′ sacó un centro con zurda desde el costado derecho que Ramsey cabeceó arriba y ocho después intercambiaron los papeles. El del Arsenal dejó sentado a Martin Škrtel y la pelota suelta fue rematada por Robson-Kanu.

No fue el mejor disparo del delantero del Reading, pero sirvió para sumar la primera victoria de Gales en una fase final y afrontar la segunda jornada (frente a Inglaterra) con tres puntos y mucha moral.
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ugador del partido: Joe Allen
Con Gareth Bale como referencia ofensiva y Aaron Ramsey jugando unos metros por delante de la medular, sobre Joe Allen recaía la responsabilidad de ser el creador de juego para poder enlazar con las otras dos estrellas de Gales. Y no le pesó la presión. El del Liverpool jugó su rol a la perfección y fue el timón para que los de Chris Coleman se estrenasen con triunfo.

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