La XIII Copa Mundial de Clubes de la FIFA empezará el 8 de diciembre en Yokohama (Japón) con siete equipos que buscarán ceñirse la corona del fútbol mundial. La edición de este año, la octava celebrada en la Tierra del Sol Naciente, presenta un buen equilibrio entre contendientes veteranos y primerizos. El Mamelodi Sundowns, el Atlético Nacional y el Kashima Antlers debutarán en la competición y se unirán al Jeonbuk Hyundai Motors y al Club América, quienes participan por segunda y tercera vez respectivamente, al veterano Auckland City y el campeón de 2014, el Real Madrid.
El Real Madrid, con una formidable plantilla repleta de estrellas internacionales, será el equipo a batir. Los madridistas, grandes favoritos de camino a la competición, aspiran a conquistar su segunda Copa Mundial de Clubes tras su triunfo en 2014 en Marruecos, donde, con goles de Sergio Ramos y Gareth Bale, se impusieron al San Lorenzo en la gran final. El coloso español tiene este año el incentivo añadido de poder suceder como campeón al eterno rival en La Liga, el Barcelona.
Ocho de los 12 campeones ha salido de Europa, pero este años los otros seis contendientes tratarán de interrumpir la tendencia. El ganador de la Copa Libertadores 2016, el Atlético Nacional colombiano, es un rival formidable, dueño de un espíritu de equipo maravilloso y de una ética de trabajo soberbia. Con un goleador de la talla de Miguel Borja liderando su delantera, se puede esperar que el equipo de Medellín plantee una amenaza formidable.
Por su parte, el Club América, ganador de la Liga de Campeones de la CONCACAF, llegará dispuesto a expiar su abrupta eliminación del año pasado. El conjunto mexicano esta convencido de que su campaña de 2015 terminó demasiado pronto (eliminado en cuartos de final ante el Guangzhou Evergrande) y espera llegar mucho más lejos. Para ello ha depositado toda su confianza en los veteranos Oribe Peralta y Rubens Sambueza.
El club residente en el estadio Azteca volverá a enfrentarse en cuartos de final al Jeonbuk Hyundai Motors, el triunfador de la Liga de Campeones de la AFC, justo 10 años después de su último encuentro en esta competición. Del once inicial que alineó el equipo coreano en 2006, el defensa Choi Chulsoon podría saltar al terreno de juego para disputar el mismo emparejamiento 10 años después. El guardameta y capitán del Jeonbuk, Kwoun Suntae, también participó en el choque de hace una década, pero se perderá la edición de este año por lesión.
Uno de los tres equipos que se estrenarán en el torneo, el Mamelodi Sundowns, ganador de la Liga de Campeones de la CAF, se encaminará a Osaka repleto de confianza para disputar su primer partido. Tras conquistar el título de su liga nacional en mayo, el equipo de Pretoria triunfó en la máxima competición continental en octubre y, de los cinco nominados al premio al Jugador Africano del Año de la CAF (para los futbolistas afincados en África), cuatro ejercen su oficio en él. Los Masandawana poseen una buena mezcla de veteranía y juventud. Además de la experiencia del capitán Hlompho Kekana, cuyo gol contra Camerún formó parte de la lista de 10 aspirantes al Premio Puskas de este año, poseen un gran caudal de energía juvenil gracias a los prometedores y fascinantes talentos de Keagan Dolly y Percy Tau.
En cuartos de final, el Sundowns de Pitso Mosimane se enfrentará al ganador del encuentro entre el Kashima Antlers y el Auckland City, los dos rivales de la eliminatoria inicial. El Kashima, que debutará en la competición, atraviesa un momento espectacular tras haberse coronado este sábado campeón de la J.League japonesa. El recién llegado se medirá contra un habitual, el Auckland City, que alcanzará el récord de ocho participaciones en esta edición. Tras caer en el primer obstáculo el año pasado, el club de Nueva Zelanda está decidido a enmendar la plana en Japón y llegará motivado por su competente actuación en 2014, cuando los hombres de Ramón Tribulietx se colgaron la medalla de bronce en Marruecos, contra todo pronóstico.
¿Sabías que…?
El trofeo de la Copa Mundial de Clubes de la FIFA se creó y fabricó en Birmingham (Inglaterra). El diseño contiene seis columnas escalonadas, que representan los seis equipos participantes de las respectivas seis confederaciones, y una estructura de metal independiente que simboliza al ganador de la competición.