Jo-Wilfried Tsonga se clasificó para disputar su primera final de la temporada en el ABN AMRO World Tennis Tournament después de batir a Tomas Berdych por 6-3 y 6-4 en un partido de una hora y 12 minutos de juego. Así, el francés peleará mañana por el título de Rotterdam, que sería el número 13 de su carrera si es que consigue levantarlo. Lo hará tras batir una impresionante marca: al derrotar al checo, Tsonga llegó a las 400 victorias en el ATP World Tour, un sello de longevidad en la élite.
Berdych y Tsonga aterrizaron en el partido con un importante historial en el torneo porque el checo ganó el título en 2014 y el francés alcanzó la final en 2011 (perdió con Robin Soderling). El viernes, Berdych se impuso sin problemas a Martin Klizan, defensor del título, y Tsonga necesitó dos desempates para superar a Marin Cilic, cabeza de serie número uno del cuadro.
El francés, que llegó al encuentro perdiendo claramente el cara a cara con su rival (3-8), demostró una gran superioridad sobre la pista en una primera manga que controló de principio a fin, sin fisuras sobre la central del torneo holandés.
Tsonga, que había llegado a las semifinales de Montpellier (perdió con Alexander Zverev) y a los cuartos de final en Doha (cedió precisamente con Berdych) y en el Abierto de Australia (cayó con Stan Wawrinka), no aflojó en el segundo parcial, sorprendiendo por completo al checo con un triunfo impecable.
Tsonga basó su victoria en unos grandes números al saque, que le permitieron vivir el encuentro sin tensión. El francés disparó 10 aces, sumó un 88% de los puntos que jugó con su primer servicio y no se enfrentó a ninguna bola de break, cediendo solo 10 puntos al resto.
Así, su pase a la final fue mucho más fácil ante un Berdych que lo intentó sin éxito. Cuando Tsonga está inspirado es muy complicado. El domingo, el francés peleará por su primer título ATP en 17 meses, el que logró en Metz 2015.
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