La Agencia de Protección Ambiental (EPA) de Estados Unidos anunció hoy que dejará de pedir información a empresas del petróleo y del gas para monitorear su contaminación.
En un comunicado, la EPA aseguró que retira, de forma inmediata, las solicitudes que obligan a los propietarios y operadores de la industria del petróleo y gas natural a proporcionar información sobre equipos y emisiones en las operaciones existentes del sector.
Esta medida también incluye a las compañías que recibieron una extensión en las fechas de entrega para proporcionar la información sobre contaminación, que ya no están obligadas a responder.
El pasado 10 de noviembre, la agencia envió la Solicitud de Recolección de Información (ICR) a las empresas con el objetivo de determinar cómo reducir el metano y otras emisiones dañinas provenientes de la industria de petróleo y gas natural.
Reducir “carga” de las empresas
La agencia aseguró que evaluará la necesidad de la información que estaba recolectando a través de estas solicitudes, después de que nueve procuradores generales estatales y los gobernadores de Misisipi y Kentucky expresaran su preocupación por la existencia de este método.
“Al dar este paso, la EPA demuestra que tomamos estas preocupaciones seriamente y estamos comprometidos a fortalecer nuestra asociación con los estados. La acción de hoy reducirá las cargas en las empresas, mientras que examinamos de cerca la necesidad de información adicional de esta industria”, afirmó el director de esta agencia gubernamental, Scott Pruitt.
Estas solicitudes constaban de una encuesta que demandaba información básica sobre los números y tipos de equipos en todas las instalaciones de producción de petróleo y gas en territorio estadounidense.
Además, una “encuesta de instalaciones” pedía aclaración más detallada sobre las fuentes de emisiones de metano y los dispositivos o las prácticas de control de emisiones en uso a través de un muestreo representativo.