Miles de personas participaron ayer en las principales ciudades de Estados Unidos en la marcha por el clima, una iniciativa que busca denunciar los efectos que tendrán las acciones del presidente del país, Donald Trump, en el cambio climático y la salud de los estadounidenses.
Desde primera hora de la mañana, los manifestantes se congregaron cerca del Congreso de EEUU y poco después del mediodía comenzaron a marchar por las calles de la capital estadounidense en una protesta que rodeó la Casa Blanca.

“Marchamos contra toda la agenda de combustibles fósiles del presidente Trump, y creemos que el camino hacia adelante está basado en la voz de la gente, que se expresa principalmente a través de protestas y marchas masivas”, señalaba el comunicado de los organizados.
Con multitud de lemas a favor del medioambiente y contra Trump, los miles de manifestantes coparon bajo un sol abrasador las principales arterias viales de la ciudad, una semana después de que se celebrase otra manifestación similar por parte de la comunidad científica, que denunciaba los recortes en investigación.

Entre los participantes, se encontraban personajes conocidos, como el actor Leonardo DiCaprio y el exvicepresidente Al Gore, que intervinieron al final del acto ante el obelisco de Washington.
La marcha coincidió con la fecha en la que se cumplían los cien días en el poder de Trump, cuyo gobierno no ha ocultado su recelo ante la evidencia del cambio climático y ha dado marcha atrás a numerosas medidas de protección medioambiental impulsadas por su predecesor, Barack Obama.
Trump ha insistido en que dará prioridad al crecimiento económico frente a las preocupaciones de los grupos ambientalistas.

Marcha en Miami
En Miami, cientos de personas se congregaron en el parque José Martí para protestar contra las políticas medioambientales de Donald Trump y los riesgos que conllevan para Florida.
Con pancartas con mensajes a favor de la conservación y el medioambiente, los manifestantes en la marcha por el clima resaltaron la amenaza que representa para Florida el aumento del nivel del mar, que según los ambientalistas podría hacer desaparecer varias partes de este estado del sur.
La concentración, al igual que las celebradas en otras ciudades de Florida, como Tampa, Fort Lauderdale, West Palm Beach, Naples o Jacksonville, se hicieron en simultáneo con la multitudinaria marcha de Washington.
Los participantes demandaron al Ejecutivo estadounidense políticas comprometidas con “las personas y el planeta”.

En el acto de Miami, poco antes de la manifestación, Gina McCarthy, exdirectora de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) durante la administración de Barakc Obama (2009-2017), sostuvo un encuentro con estudiantes y ambientalistas, en el que enfatizó la evidencia científica que certifica los efectos del calentamiento global.
La jornada en esta ciudad del sur de Florida incluyó actuaciones de varios grupos latinos, africanos y afrocaribeños, y se inició con una ceremonia de bendición del agua hecha por activistas indígenas de Perú y Canadá.

Trump y el clima

En sus primeros 100 días en la Presidencia, Trump ha propuesto el recorte del 31 % del presupuesto de la EPA, encargada de estudiar el clima y dirigida ahora por Scott Pruitt, un escéptico del cambio climático.

efeverde.com