Bajo un ambiente espectacular de fútbol y arropados por su afición, que no paró de animar durante los 90 minutos, el Celta de Vigo cayó derrotado por 0-1 frente al Manchester United en el partido de ida de las semifinales de la UEFA Europa League.
A los hombres de José Mourinho les costó, pero poco a poco comenzaron a poner en problemas a los celestes, que no lograban mantener el balón. Un remate de Marcus Rashford y otro disparo a quemarropa de Henrikh Mkhitaryan fueron repelidos por el portero Sergio Álvarez en lo que fueron las primeras dos ocasiones claras de los Diablos Rojos.
En la recta final de la primera parte los visitantes tuvieron otro mano a mano, esta vez en las botas de Jesse Lingard, que estrelló su remate en el cuerpo del portero local. En ese momento, el United creaba muchísimo peligro con muy pocos pases, mientras que el Celta no gozó de la claridad necesaria con el balón en los pies.
Tras el paso por vestuarios el Celta salió bien, controlando un poco más el balón que su rival, pero llegó tímidamente a la portería defendida por Sergio Romero. Sólo un disparo de Pione Sisto, desde el vértice del área, inquietó al portero argentino del United en los primeros compases del segundo acto.
Fieles a su guion, el equipo visitante se adelantó en el marcador en su primer y casi único disparo en el segundo tiempo. Fue gracias a un trallazo de Marcus Rashford, que laznó magistralmente una falta directa para batir a Sergio Álvarez a poco más de 20 minutos para el final del partido.
Este resultado obliga al Celta a hacer una verdadera machada para estar en su primer final europea, ya que debe ganar a todo un Manchester United en Old Trafford, dónde los ingleses se han llevado la victoria en todos los partidos disputados (la última de ellas en la prórroga) en esta UEFA Europa League.