Bogotá, D.C. 12 de mayo de 2017. En medio de la celebración del Día del río Bogotá, el viceministro de Ambiente, Carlos Alberto Botero López y los actores de las entidades que hacen parte del Consejo Estratégico de la Cuenca Hidrográfica (CECH), navegaron el río con el fin de mostrar los avances en las obras de adecuación hidráulica que ha realizado la CAR Cundinamarca hasta ahora, con el fin de conocer su proceso de descontaminación y recuperación.
La Cuenca Hidrográfica del río Bogotá, donde habitan más de 10 millones de personas y que recorre 46 municipios y el Distrito Capital, resulta ser un recurso elemental para la biodiversidad “hoy la cuenca media está recuperada en su parte visual, está arborizada y con siembra de plantas y especies nativas ha permitido que la fauna venga al río. Los patos canadienses tienen un asentamiento más fuerte y el cuerpo de agua sirve como ruta migratoria de aves”, explicó José Ricardo Rodríguez Díaz, asesor del Ministerio, delegado para el CECH.
Otro motivo clave sobre hacer navegable el río “es que en un futuro, no muy lejano, se pueda convertir en una nueva alternativa de transporte que conecte a la gente desde la calle 80 a Soacha a través del río, que sería una gran solución de movilidad”, explicó el viceministro Carlos Alberto Botero López, conforme a lo que viene impulsando la CAR.
Dentro de los resultados de las intervenciones realizadas a la fecha, se tiene que las obras de adecuación hidráulica en la cuenca media del río se desarrollaron en 68 km entre las compuertas de Alicachin, en el municipio de Soacha, hasta el puente de La Virgen, en la vía Suba-Cota. Se extrajeron más de 6 millones de metros cúbicos en sedimentos y basuras que habían sido arrojados durante años al río, se amplió el cauce de 30 a 60 metros de ancho y con ello y el dragado, se duplicó la capacidad de transporte de agua de 100 a 200 metros cúbicos por segundo.
“Hemos adquirido 680 hectáreas, de las cuales 230 fueron adecuadas para zonas de inundación controlada a lo largo de la cuenca. También adelantamos la restauración ecológica de los predios y las zonas de ronda con la plantación de100.000 árboles de más de 20 especies nativas. Se construyó un parque lineal con senderos peatonales para el disfrute de la comunidad y un ecosistema de 68 km. Esta intervención está en un 90% y será entregada en el segundo semestre del 2017, gracias a una inversión de más de 200.000 millones de pesos”, afirmó Néstor Guillermo Franco González, director general de la CAR.
El Ministerio y la CAR siguen avanzando en el cumplimiento de la sentencia del Consejo de Estado para el río Bogotá con acciones como el Consejo Estratégico de la Cuenca, presentando la reglamentación y el plan de trabajo que sería la carta de navegación en los próximos dos años.
Otras de las acciones que se adelantan con el objetivo de mejorar la calidad del agua del río, son las obras de ampliación y optimización de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales-PTAR El Salitre, que inició la CAR en abril de 2017.
Se espera que tras la culminación de la adecuación hidráulica en la cuenca media, se inicie la intervención de la cuenca alta del río, en el kilómetro 47, entre el puente de La Virgen en la vía Suba-Cota, hasta el puente de Vargas en el municipio de Cajicá.
Según un artículo publicado en 1997, en esa época quienes navegaran por el río Bogotá debían usar una máscara de oxígeno y un traje enterizo que cubría hasta el cuello y que normalmente se usa para limpiar el interior de tanques que guardan químicos, “hoy el río se puede navegar con una protección menos rigurosa, permitiendo observar la recuperación del ecosistema de flora y fauna a través del recorrido” agregó Rodríguez.
Reglamentación de la Minería
El 2 de diciembre de 2016 el Ministerio expidió la resolución 2001 en la cual se delimitan las zonas compatibles con la minería en la sabana de Bogotá, en ella se reglamentaron la totalidad de los minerales que son explotados allí y se establece un marco legal para las autoridades y los beneficiarios que contribuye a fomentar la legalidad y a reducir las actividades de explotación ilícita de minerales. Este ejercicio fue evaluado por el Tribunal Administrativo de Cundinamarca mediante una serie de inspecciones que permitieron verificar el trabajo realizado por el Ministerio, el cual contribuye en gran medida al proceso de descontaminación de la cuenca del río Bogotá.
En la actualidad, en la mayoría de las zonas definidas como compatibles con la minería se están desarrollando actividades y son objeto de control ambiental en sus diferentes fases y están sujetas a control y seguimiento de las autoridades ambientales y mineras.
Otro de los avances es la expedición de la norma, que busca evitar impactos ambientales adicionales como la Intervención intensiva de ríos como el Guayuriba (Meta) y el Nilo, Saldaña (Tolima), entre otros y busca disminuir significativamente el tráfico vehicular; las emisiones de Gases de Efecto Invernadero; el consumo de llantas y las explotaciones ilícitas.