Más de 1 millón de personas afectadas y damnificadas ha dejado el fenómeno “El Niño Costero” en Perú, que golpeó al país con severas precipitaciones, inundaciones y deslizamientos de tierra durante los meses de enero a marzo, particularmente en la costa del norte del país.

Según el Ministerio de Agricultura y Riego de Perú (MINAGRI) cerca de 7 mil productores agrícolas han sido afectados, de los cuales el 80 por ciento son pequeños agricultores. Más de 60 mil hectáreas de cultivos han sido severa o parcialmente afectadas y 18 mil hectáreas resultaron completamente inutilizables a nivel nacional.

Para enfrentar esta situación, el gobierno de Perú aprobó el Plan de Reactivación del Agro con una inversión de USD 76 millones, respuesta que la FAO buscará complementar solicitando a la comunidad internacional USD 3.1 millones para restablecer la agricultura familiar en las zonas más alejadas de las regiones de Piura, Lambayeque y La Libertad.

Hasta el momento, la FAO ha podido acceder a fondos de Naciones Unidas por casi USD 290 mil, para brindar atención inmediata a las familias de pequeños agricultores de la región Piura que han perdido sus medios de vida, restableciendo su capacidad productiva con cultivos de primera necesidad para el autoconsumo.

El proyecto de recuperación de la FAO proveerá insumos para el establecimiento de huertos familiares, la recuperación de infraestructura de riego y la asistencia técnica en materia de sanidad animal.

Estas actividades se implementarán de forma directa con los agricultores afectados mediante transferencias de efectivo por trabajo, para asegurar la generación de ingresos de las familias, garantizar el acceso a los alimentos y mitigar el abandono de las parcelas y la migración hacia las ciudades.

Recuperación integral

Con los fondos que FAO solicita a la comunidad internacional, trabajará para lograr una recuperación integral de los agricultores y acuicultores familiares afectados en lugares remotos de Piura, Lambayeque y La Libertad. (Llamado urgente de Emergencia por Inundaciones – Perú 2017)

En estas regiones apoyará la rehabilitación de los mercados locales de abastos, para asegurar que los agricultores y acuicultores puedan insertarse rápidamente en estos canales de comercialización, de manera que obtengan fuentes directas de ingresos.

Actualmente, el MINAGRI está implementando acciones para determinar el riesgo de enfermedades animales, la limpieza de cauces de ríos y reparación de canales de riego, la entrega de bono de emergencia y el refinanciamiento de deudas, la ampliación del seguro agrario, y la creación de facilidades para trasladar productos agropecuarios a los mercados principales.

Impactos de “El Niño Costero” en la seguridad alimentaria

Los impactos de “El Niño Costero” han alcanzado a comunidades rurales y zonas urbanas en 24 de los 25 departamentos del país.

En los departamentos de la Costa Norte, unas 445 000 personas -el 59% de los hogares afectados- se encuentran en situación de inseguridad alimentaria, según un informe preliminar de la Seguridad Alimentaria en Emergencias realizado por el Programa Mundial de Alimentos.

El 32% de las familias afectadas están aplicando estrategias de supervivencia negativas relacionadas con el consumo de alimentos, como el racionamiento dietético para los más pequeños, comprometiendo aún más su seguridad alimentaria.

Las organizaciones de la Red Humanitaria de Perú han identificado intervenciones urgentes de asistencia alimentaria para atender a los damnificados en los tres departamentos más afectados por las lluvias, huaycos e inundaciones: financiar las intervenciones propuestas en materia de seguridad alimentaria y nutricional asciende a USD 4.9 millones.

La Representación de la FAO en Perú hace un llamado a la comunidad internacional para que apoyen la recuperación de los medios de vida de los pequeños agricultores y acuicultores afectados, a través de estos proyectos debidamente coordinados con el gobierno nacional y los gobiernos subnacionales.

FAO apoya la creación de una estrategia regional de gestión del riesgo de desastres

Los desastres climáticos son las emergencias que más impactan la seguridad alimentaria y la agricultura en América Latina y el Caribe.

Según la FAO, enfrentarlas requiere una adecuada gobernanza del riesgo, sistemas de monitoreo y alertas tempranas, implementación de buenas prácticas y tecnologías de prevención y mitigación del riesgo en el sector agrícola, y una preparación que garantice una respuesta rápida enfocada en salvar vidas y medios de vida.

La FAO, junto con la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNISDR), está apoyando a los países de la región América Latina y El Caribe a desarrollar una Estrategia Regional de Gestión del Riesgo de Desastres en el sector agrícola y la seguridad alimentaria y nutricional, en respuesta a la solicitud de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, CELAC.