Tras jugar por última vez Roland Garros en 2012, Juan Martín Del Potro regresó al segundo Grand Slam de la temporada venciendo a Guido Pella y firmó así un dulce regreso al torneo parisino.
“Voy torneo a torneo, dejándome sorprender por lo que pueda lograr”, reconoció el argentino tras la victoria. “Recuerdo que cuando perdí la semifinal de 2009 aquí con Federer… sentía que ese año el torneo era para mí, pero caí con Federer ese día”, prosiguió Del Potro. “Pensé que nunca más podría hacer un buen resultado en un Grand Slam y pocos meses después acabé ganando el US Open.
El año pasado tampoco me imaginaba todo lo que me pasó, el nivel que mostré. Sé cómo es mi juego y sé que cuando estoy bien soy peligroso para cualquier rival, pero disfruto mucho más del día a día”.
Del Potro, que ahora se encontrará con Nicolás Almagro, celebró el estado de su revés, que contra Pella estuvo a buen nivel pese a ser exigido por las acometidas de su rival, que cargó buena parte de su juego sobre la zona más débil de Del Potro.
“Lógicamente, mi revés va evolucionando”, dijo el número 30 del Emirates ATP Rankings. “Me siento bien, pero eso no quita que haya momentos en los que quiera acelerar o buscar un tiro más exigente me frustre. Hoy le demostré a Pella que revés ya no es un punto tan débil. Su estrategia era jugarme más para ese lado, pero con el revés he podido contener sus ataques bien”, añadió.
“Me da alegría saber que el revés va evolucionando bien”, insistió el argentino, que se reencontró con las buenas sensaciones sobre la tierra batida de París.
“Me he sentido mejor de lo que esperaba”, apuntó Del Potro. “Estuve muy sólido y saqué realmente bien. Eso me ha dado tranquilidad general en todo mi juego. Ha sido una primera ronda de un torneo muy importante que hacía mucho que no jugaba”.
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