Este sábado será una jornada inusual. Por primera vez en cinco años, no habrá integrantes del Big-Four (Roger Federer, Rafael Nadal, Novak Djokovic y Andy Murray) en semifinales de un torneo de Masters 1000. La última vez que eso pasó fue en París 2012 cuando terminó imponiéndose David Ferrer, casualmente uno de los cuatro jugadores que lucharán este fin de semana por el título en el Western & Southern Open de Cincinnati.

El español es el único de los semifinalistas con título de Masters 1000 y además tiene récord positivo contra todos. Lidera 1-0 el historial con el australiano Nick Kyrgios, a quien venció en el US Open 2013 y a quien enfrentará este sábado (no antes de las 19.00, hora local). Y ante los jugadores de la otra llave también tiene pasado positivo: de 7-2 ante el local John Isner y de 5-1 sobre el búlgaro Grigor Dimitrov.

La de este sábado será la semifinal No. 99 en la carrera de Ferrer en el ATP World Tour. Y buscará avanzar a la final No. 53, lleno de confianza después de vencer a su primer Top 10 de la temporada (Dominic Thiem) en cuartos. También por clasificarse a semifinales de Masters 1000 por primera vez desde París 2015 (l. Murray). Tuvieron que pasar 10 torneos de esta categoría para que volviera a alcanzar esta ronda.

La última vez que el No. 31 del Emirates ATP Rankings se clasificó a la instancia definitiva de un Masters 1000 fue precisamente en Cincinnati 2014 cuando derrotó al francés Julien Benneteau antes de caer con Roger Federer en la final. En su participación No. 114, el español de 35 años está buscando su segundo título de Masters 1000 tras ganar en París 2012 (d. Jerzy Janowicz).

Kyrgios, por su parte, viene de vencer a Ivo Karlovic y a Rafael Nadal en una sola jornada y de conseguir 100 victorias en su carrera en el ATP World Tour (Leer más). Disputará su tercera semifinal de Masters 1000 y ante Ferrer buscará su primera clasificación a una final en torneos de esta categoría. Si lo consigue, avanzará también por primera vez a una final ATP desde Tokio 2016.