Los países de Centroamérica y la República Dominicana trabajan en la identificación y definición de proyectos tecnológicos de adaptación y mitigación al cambio climático con la aspiración de canalizar apoyo técnico y financiero en cuatro áreas prioritarias para la región: eficiencia energética, movilidad eléctrica, eficiencia hídrica y resiliencia costera.
Centroamérica es una región geográficamente vulnerable a los efectos del cambio climático y en los últimos años ha sufrido el impacto de intensos períodos de lluvia y sequía que amenazan la vida y la seguridad alimentaria de millones de personas y causan cada año pérdidas millonarias por daños materiales.
“La crisis hídrica, especialmente en el corredor seco centroamericano, afecta la producción agrícola, el desarrollo de las comunidades y las fuentes de energía. En general, estimamos que Latinoamérica perderá alrededor de 25% de su generación hidroeléctrica por falta de agua de aquí a 2040, de ahí la importancia de la eficiencia energética para maximizar el uso de recursos y disminuir el consumo”, dijo el Coordinador de Cambio Climático para Latinoamérica y el Caribe de ONU Medio Ambiente, Gustavo Máñez.