La Agencia Espacial Europea (ESA) ha mostrado las primeras imágenes sin precedentes sobre la contaminación atmosférica enviadas por el satélite Sentinel-5P, lanzado el espacio el pasado octubre, que suponen una nueva dimensión en materia de resolución y calidad de datos.
“El gran logro es la resolución de las imágenes, la precisión y el detalle que se obtienen de estos datos. Realmente es polución ‘full HD’, si se compara con anteriores mediciones de resolución más baja”, afirmó el director de Programas de Observación de la Tierra de la ESA, Josef Aschbacher, en una rueda de prensa en el Centro Aeroespacial Alemán (DLR) en Oberpfaffenhofen (sur de Alemania).
El espectrómetro de imágenes multiespectrales más avanzado hasta la fecha, Tropomi, instalado en el Sentinel-5P, es el instrumento que recogerá los datos sobre los diferentes gases que se encuentran en la atmósfera, ente ellos el dióxido de nitrógeno, el ozono, el monóxido de carbono, el metano, el formaldehído, el dióxido de azufre y los aerosoles.
Contaminación en alta resolución
La “resolución sin precedentes” de Tropomi, con un tamaño de píxel de 7×3,5 km2 permitirá una cobertura global diaria y se traducirá en un volumen de datos de aproximadamente 640 GB por día, precisó Aschbacher.
Se trata de una “nueva dimensión” en términos de calidad de datos y resolución, doce veces mayor de la que se podía obtener hasta ahora desde el espacio, lo que supone una “nueva era en las mediciones de la calidad del aire”, subrayó.
“Tenemos alrededor de 4.000 longitudes de onda por espectro y medimos unos 450 espectros por segundo y veinte millones de estas observaciones por día”, precisó Pepijn Veefkind, del Real Instituto Meteorológico de Holanda, al mostrar varias imágenes creadas a partir de los datos enviados por Sentinel-5P.
Richard Bamler, del Centro de Observación de la Tierra de la ESA, reconoció que los resultados han superado todas las expectativas y agregó que “esta misión, con veinte millones de mediciones al día, constituye verdaderamente algo revolucionario”.
El objetivo de esta nueva misión del programa europeo Copérnico de observación de la Tierra es ofrecer información sobre la calidad del aire en tiempo real, es decir, tres horas después de las mediciones, precisó.
Monitoreo atmosférico
La información que se obtenga de esta nueva misión, recogida a través del servicio de Monitoreo Atmosférico Copérnico, será utilizada para las predicciones de la calidad del aire y la toma de futuras decisiones relativas al cambio climático.
También será de utilidad para el seguimiento de cenizas volcánicas que influyen en la seguridad de los aviones o para los servicios de alerta en altos niveles de radiación ultravioleta que pueden causar enfermedades de la piel.
Según datos de 2016 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se registran 6,5 millones de muertes prematuras en el mundo, el 11,6 % de las cuales están relacionadas con la polución.
En la Unión Europea (UE), la contaminación del aire es la causante de 500.000 muertes prematuras, recordó Aschenbacher.
Según el director de Programas de Observación de la Tierra de la ESA, “estamos pasando de un debate más científico a un debate político, algo muy necesario e importante”.
Expresó su esperanza de que una vez estén disponibles todos estos datos, los políticos sepan valorarlos y aprovechen la oportunidad que les brinda esta información para la correcta toma de decisiones.
Las imágenes mostradas hoy son sólo un adelanto de los datos que ofrecerá Sentinel-5P una vez que la misión comience a cartografiar diariamente a unos 2.600 kilómetros la totalidad del planeta con una precisión nunca vista para lograr nuevas cotas en la previsión de la calidad del aire.
El objetivo ahora es que Sentinel-5P, el sexto satélite Sentinel del programa Copérnico, logré funcionar a pleno rendimiento en los próximos meses, precisó por su parte Erhard Diedrich, del DLR. EFEverde/EFEfuturo