El directorio de la ANFP mantuvo ayer su compromiso con el colombiano, quien asumirá el cargo la próxima semana, tras desvincularse personalmente de Flamengo. Con el fichaje del caleño ad portas, Eduardo Berizzo hizo llegar a Salah y Fazio su disponibilidad para asumir en la Roja. Pero su oferta fue tardía, le dijeron.
Reinaldo Rueda será el nuevo técnico de la selección chilena. Hace días que la ANFP y el técnico vienen afinando los detalles del contrato que los unirá por todo el proceso rumbo a Qatar 2022. El lunes se acordaron los montos y el miércoles, la cláusula de salida para ambas partes. Estaba todo atado, con la reputada palabra de Arturo Salah comprometida. Sin embargo, en Quilín irrumpió en las últimas horas una opción de las que no se pueden despreciar de primeras: Eduardo Berizzo le hizo llegar al presidente federativo y a Andrés Fazio, el vicepresidente encargado de encontrar DT, que no sólo estaba disponible para dirigir a Chile, sino que quería hacerlo.
Tras varias reuniones en el último mes y discutir unos cuantos detalles, al actual técnico del Flamengo, de 60 años, se le espera en Chile la próxima semana para los actos más importantes: la firma de su contrato y su presentación oficial. El compromiso de caballeros está cerrado y esto incluye que el propio Rei le informe a su club que ejercerá la cláusula de salida. “Rueda lo pidió así y una vez que cumpla esa formalidad, la Federación pagará la rescisión (US$ 325 mil) y lo anunciará oficialmente”, indica a La Tercera una fuente que participa en la negociación.
Al mismo tiempo que el caleño y la asociación se daban la mano a la distancia, la figura de Eduardo Berizzo, de 48 años, el ayudante de Bielsa en su glorioso paso por Chile, el técnico que adquirió celebridad en O’Higgins y el Celta, despedido de mala manera del Sevilla por sus malos resultados el pasado 22 de diciembre, menos de un mes después de ser operado de un cáncer prostático, se apareció por la casa central del fútbol chileno.
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