Nerea González.- Johannesburgo (EFE).- Ciudad del Cabo, la segunda ciudad más grande de Sudáfrica y corazón turístico del país, está en cuenta atrás para quedarse sin agua. Si sus habitantes y los miles de turistas que visitan la zona estos meses no reducen drásticamente su consumo, el contador llegará a cero el próximo 12 de abril.

Esa fecha ha sido bautizada como el “Día Cero”, la jornada en la que el nivel de las presas llegará, si los hábitos no cambian, al 13,5 % y la ciudad se vería obligada a interrumpir la distribución normal, convirtiéndose en la primera gran urbe desarrollada en quedarse sin agua en los tiempos modernos.

Pese a los esfuerzos, el plazo hasta el Día Cero no solo se mantiene como una amenaza más que probable, sino que se ha venido acortando.

La última medida lanzada por las autoridades de la zona -principal baluarte de la opositora Alianza Democrática (AD)- ha sido pedir a los ciudadanos un consumo máximo por día y persona de 50 litros. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), solo en una ducha de 5 minutos se gastan unos 100 litros de agua.

La sequía que asuela la zona es un fenómeno inusual ya que no solo deriva de la escasez de precipitaciones que caracterizó la pasada temporada de lluvias (abril-octubre), sino de que el nivel de lluvia fue particularmente bajo también durante los dos años previos.

Se queda sin agua

Vista de un pez muerto en la presa de Theewaterskloof en Villiersdorp, Sudáfrica. EFE/ Nic Bothma

Vista de un pez muerto en la presa de Theewaterskloof en Villiersdorp, Sudáfrica. EFE/ Nic Bothma[box type=»shadow» align=»alignright» ]“Ciudad del Cabo actualmente se enfrenta a una situación sin precedentes. Es un hecho científico que experimentamos la peor sequía jamás registrada. Es un desastre natural de inmensas proporciones. Sabemos que el Día Cero es una posibilidad muy real”, reconoció esta semana Mmusi Maimane, líder de la AD, quien se ha involucrado en persona ante la gravedad del escenario.[/box]

Aunque no se esperan nuevas lluvias hasta abril, las autoridades conservan el optimismo respecto a la posibilidad a ese límite y mantienen abiertas las puertas al turismo, pese a que la temporada alta coincide con los meses más secos del año, en una suerte de tormenta perfecta.

“Tenemos una impresionante trayectoria (…). Hace dos años usábamos 1.200 millones de litros de agua como ciudad y lo hemos recortado a la mitad. No creo que ninguna otra ciudad del mundo haya logrado hacer eso”, explicó a Efe Tim Harris, director ejecutivo de la Agencia Oficial de Promoción del Turismo, el Comercio y la Inversión en Ciudad del Cabo y el Cabo Occidental (Wesgro).

“Obviamente por estos eventos, que solo ocurren potencialmente una vez cada mil años (…), tenemos que acortar incluso más allá”, agregó.
Harris indicó que, pese a la sequía, la temporada turística ha sido “muy buena” y que, incluso aunque llegue el Día Cero y los grifos dejen de funcionar en amplias zonas residenciales, los hoteles figurarán entre los negocios básicos cuyo funcionamiento quedaría asegurado por la ciudad.

“Y lo que es mejor, hemos visto una respuesta increíble de los turistas en ahorrar agua. Se han unido a los esfuerzos con entusiasmo, se han dado cuenta de que pueden ser parte de la solución uniéndose al espíritu de Ciudad del Cabo”, recalcó Harris.

Solo superada por Johannesburgo en cantidad de habitantes, Ciudad del Cabo es un núcleo turístico fundamental del país ya que en su área se aglomeran 13 de las 20 principales atracciones turísticas de Sudáfrica. Solo en 2017 recibió a 1,3 millones de turistas internacionales y la tendencia va al alza.

Playas con pingüinos y olas para hacer surf, una amplia región de viñedos que da fama mundial a Sudáfrica para los amantes del vino y la majestuosa Table Montain (Montaña de la Mesa, una de las Siete maravillas del mundo) que custodia el perfil de la ciudad son solo algunos de ellos. Sudáfrica es, además, con mucha diferencia, el destino turístico internacional más importante de África Subsahariana, de acuerdo a los datos que maneja la Organización Mundial de Turismo (OMT).

De los 25.637 millones de dólares (unos 20.615 millones de euros) que la región ingresó a través de este sector en 2016 (según la edición 2017 del informe “Panorama OMT del turismo internacional”), 7.910 millones (unos 6.360 millones de euros) se sumaron vía Sudáfrica (30,85 %).

“Ciudad del Cabo se está convirtiendo en un destino turístico cada vez más popular. Pero por supuesto la sequía solo afecta a parte del Cabo Occidental (provincia que alberga la urbe). Tenemos numerosas partes donde hay abundante agua”, puntualizó Harris.

Mientras, Ciudad del Cabo mira a regiones como California o a Australia Occidental o incluso ciudades similares, como Barcelona, en busca de alternativas para que, aunque sea altamente improbable, en el futuro no se repita esta situación. EFEverde
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