• Croacia está haciendo su mejor Mundial en 20 años
  • Modric supera un maleficio en los penales que duraba una década
  • “Ganar el Mundial es casi impensable, ¡sería algo de ensueño!»
Por Vjekoslav Paun, con Croacia

El triunfo en la tanda de penales sobre Dinamarca ha supuesto un verdadero punto de inflexión para la selección croata en la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018. Especialmente para un jugador, su gran figura, que por fin ha conjurado el maleficio que le perseguía desde la UEFA EURO 2008.

Luka Modric es un mago del fútbol mundial, dotado de una espectacular calidad técnica. Sin embargo, ese toque mágico pareció ocultarse durante el choque de octavos de final. La presión existente en torno a esta generación especial de jugadores croatas era enorme. En su caso, más todavía.

“En 2008 perdimos en la primera ronda de eliminatorias, y desde entonces no conseguíamos superarla, así que era muy importante deshacernos de ese peso de una vez”, explicó a la FIFAModric, quien hace una década falló en Viena el primer lanzamiento de la tanda de penales ante Turquía.

“Después de muchos años de intentarlo, hemos logrado un gran resultado, para mí eso significa mucho. Estoy en la selección desde 2008, y en todo este tiempo hemos sufrido varias derrotas por mala suerte, sobre todo contra Turquía y Portugal [en la Eurocopa 2016]. Nos hacía falta algo de suerte, y creo que ha sido merecida”.

Un fallo, un acierto, una emoción muy grande

A falta de cinco minutos para que terminase la prórroga, el propio Modric tuvo la ocasión de sentenciar el encuentro, cuando asumió la responsabilidad de lanzar un penal que habría supuesto el 2-1 a favor de Croacia. Se quedó quieto durante unos instantes, antes de retomar la compostura y ejecutar el lanzamiento, pero Schmeichel lo detuvo. Apenas quince minutos más tarde volvería a enfrentarse con el arquero desde los once metros: su golpeo se metió por el centro de la portería.

Estaba tranquilo y concentrado. Acepté la responsabilidad, por ser el capitán, y tenía que hacerlo. Después del partido me sentí muy emocionado, como es lógico. Quería que esta selección croata demostrase su calidad yendo un paso más allá. No fue un partido para disfrutar, pero se alcanzó el objetivo”.

Su próximo rival es Rusia, que ha desbaratado los pronósticos al llegar a esta fase siendo la selección peor clasificada de todo el certamen. La organización y la actitud de los jugadores rusos fueron fundamentales para impedir que España desplegase todo su potencial, y acabaron imponiéndose también en la tanda de penales. ¿Asistiremos a un escenario similar ante Croacia?

“Sí, yo creo que su táctica va a ser parecida. Jugar contra Rusia es muy incómodo. Es un equipo que corre mucho y está muy bien organizado. Merece estar en cuartos de final, y no cabe duda de que ahora saldrá a intentar aprovechar su oportunidad de ganar. Va a ser un espectáculo medirse con Rusia y con su afición”.

Aunque Luka está disfrutando de su participación en este Mundial, tiene otro sueño, que apunta mucho más alto.

“Participar en este Mundial es un privilegio enorme, y jugar con mi selección un gran honor y un auténtico placer. Pero ganar el Mundial con Croacia es casi impensable, ¡sería algo de ensueño! Sería increíble alzar el trofeo como capitán”.

fifa.com