Colombia escribió uno de sus hitos más grandes en su recorrido en el baloncesto femenino, la noche de este martes al conquistar el oro de los XXIII Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018, al vencer 67-65 a Cuba.
El triunfo fue empujado por un coliseo Elías Chegwin explosivo y que cumplió al pie de la letra con aquello de ser el ‘sexto jugador’ del equipo nacional.
Y es que desde el principio Colombia encontró en las gradas el respaldo sensacional de una afición que sabe acoger mejor que nadie en el país a las delegaciones deportivas.
Los barranquilleros hicieron tronar hasta sus nuevas bases al Elías Chegwin desde antes de que iniciara el partido nada más con entonar el himno nacional, y proseguir con su letra a todo pulmón cuando acabó la música. Fue una impresionante demostración de moral, eran la primera cesta de la noche. Y era de tres puntos.
La cosa no estaba derecha en el primer cuarto. Colombia perdía 17-15, pero la grada no aflojaba.
A los gritos de ‘sí se puede’ y a los coros de ‘Colombia-Colombia-Colombia’, las canastas pronto se fueron dando en el maderamen, pero con medio partido jugado, el 30-23 del tanteador hacía presagiar lo peor.
Pero, ahí cuando llego, como era necesario , lo mejor de Colombia.
Las chicas locales, manejadas por la bugeña Mairca Caicedo y la barranquillera Janeth Arias, fueron carburando una remontada que las dejó ganadoras luego de una defensa que apenas permitió 9 puntos en su aro y que en cambio anotó 18 puntos en la cesta isleña.
Así, con cada grito de una grada decidida a premiar con el triunfo a la suyas, se fue construyendo un marcador nuevo: 41-39 a favor de las locales.
En un cuarto final, en el cual hubo toma y dame por parte de ambos equipos, el marcador terminó empatado con un 55-55 que obligaba a los 5 minutos de prórroga más importantes que se hayan jugado en el piso del Elías Chegwin.
Cuba, aturdida por el avasallante ruido de la afición de casa, se desconectó en un tramo del partido, lo suficiente para timar ventaja por Colombia y defender hasta el chincharrazo final y dejar el 65-67 para darle al oro a las locales, luego de un gardeo de última mano para sellar el triunfo.
De esta manera las chicas colombianas se aseguraron la primera presea de oro de un deporte de conjunto que se repartía en las actuales Justas. De otro lado, Cuba se quedó con la plata, mientras que República Dominicana se conformó con el bronce.