El ecosistema marino, uno de los más productivos del mundo, necesita protección contra el cambio climático. De lo contrario, países como Chile y Perú verán reducida su capacidad pesquera para el 2050. De hecho deben disminuir la pesca a niveles sostenibles a largo plazo.

La corriente de Humboldt ha sido uno de los ecosistemas marinos más ricos del mundo durante las últimas décadas. Sin embargo, está amenazado por el cambio climático y puede perder parte de su producción, según destaca un nuevo estudiode la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura publicado este martes.

Esta situación provocaría importantes cambios en países que se nutren de esta corriente marina como son Chile, Ecuador y Perú ya que el incremento de las temperaturas puede dar lugar a la aparición de episodios más frecuentes de los fenómenos de El Niño y La Niña, y originar una disminución de la extensa cantidad de plancton.

El estudio destaca un alto nivel de incertidumbre en sus proyecciones, pese a que sus potenciales consecuencias son importantes y, añade, que los países deberían considerar una serie de medidas en su gestión para combatirlas.

Entre ellas destaca la institucionalización de los sistemas de gestión participativa, la potenciación de estudios científicos especializados y la mejora de los sistemas de control que aumentarían la capacidad de adaptación de la pesca en pequeña escala frente al cambio climático.

Asimismo, si se quiere garantizar la sostenibilidad a largo plazo se ha de efectuar un control más estricto y llevar a cabo unareducción de la capacidad de captura a niveles sostenibles, en concreto de pesca marina.

Los efectos ya se sienten

Entre 2005 y 2015 se pescaron 9,35 millones de toneladas de peces, moluscos y crustáceos, con una notable tendencia decreciente, principalmente debido a la aplicación de planes de gestión más estrictos, pero también a la variabilidad climática y, en algunos casos, a la sobreexplotación.

La región centro-norte de Perú registró el 75% de las capturas totales, el sur de Perú y norte de Chile obtuvo casi un 20%, mientras que el centro de Chile aportó menos del 5%.

La publicación pronostica una disminución moderada del potencial de captura de Chile y Perú para 2050, “ya que el cambio climático puede reducir significativamente el éxito de desove de los pequeños peces pelágicos que captura el sector industrial”.