CINCINNATI, OH, EE. UU. – El año pasado, el swing en pistas duras norteamericanas reavivó por primera vez la carrera de Sloane Stephens, luego la impulsó al siguiente nivel, y la cabeza de serie número 3 en el Western & Southern Open está recogiendo su forma exactamente donde ella lo dejó, abriendo su campaña con una derrota por 6-3, 6-2 ante la jugadora de la previa Tatjana Maria en una hora y 11 minutos.
En 2017, las semifinales consecutivas en Toronto y Cincinnati prepararon el escenario para una emocionante carrera por el título en el US Open para Stephens, ganando su primer Grand Slam. Este año, la jugadora de 25 años de edad ya ha tenido una mejor actuación en Canadá, llegando a la final en Montreal antes de perder un clásico partido de tres sets ante Simona Halep el domingo. Después de esa derrota, Stephens se mostró visiblemente emotiva, algo raro en la relajada estadounidense. Pero antes de su torneo de esta semana, el entrenador Kamau Murray describió cómo el enfoque calmado sobre las derrotas la mantiene estable, y a pesar del agotador encuentro de hace cuatro días, Stephens parecía fresco y ansiosa hoy en superar el talento táctico y la variedad de María.
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