El Espanyol vuelve a la competición con un triunfo convincente ante el Alavés

Tocaba ganar y se ganó. El regreso a la competición fue el deseado. Victoria, goles y una buena imagen del equipo en líneas generales. El Espanyol fue muy superior a su rival. Bernardo acabó con la resistencia vitoriana antes del descanso y Wu Lei remató justo después de la reanudación. Con el marcador controlado y un rival adormilado, los de Abelardo Fernández convirtieron los minutos finales en un mero trámite.

El nuevo fútbol volvía al RCDE Stadium, pero con las viejas urgencias del equipo. Después de más de tres meses, el RCD Espanyol empezaba ante el Alavés su particular liga exprés para lograr los que muchos consideran un milagro: la salvación. Abelardo tiró de su once básico con la inclusión de Melendo por banda derecha y con la dupla ofensiva Calleri y Wu Lei. El conjunto blanquiazul tuvo las ideas bastante claras desde el inicio y no dio apenas opción a su rival. En líneas generales, los pericos supieron adaptarse al extraño contexto del partido, que va a ser el habitual de aquí a final de temporada.

Pronto empezaron a suceder cosas. Una carrera de Wu Lei acabó con la expulsión de Pacheco, quien agarró la pelota claramente fuera del área. Ni una protesta. El portero visitante se quitó los guantes antes de que el árbitro le mostrara el camino de los vestuarios. Embarba intentó rematar la faena, pero su lanzamiento de falta impactó en David López. Lo cierto es que el extremo y Wu Lei estuvieron muy participativos y casi siempre fueron los protagonistas de las jugadas de ataque de los locales. El atacante chino tuvo dos remates muy claros, pero se topó con Roberto, que parecía dispuesto a amargar la mañana a los blanquiazules. El madrileño se erigió en el héroe visitante con sus paradas y evitó en más de una ocasión que los locales se adelantaran en el marcador. Sin embargo, la insistencia dio su premio y Bernardo consiguió inaugurar el marcador con un remate de cabeza. Gol y justicia.

El equipo salió muy mentalizado tras el descanso, mantuvo la concentración y siguió encerrando a su rival. A los dos minutos, Wu Lei allanaba el camino a la victoria al definir en uno contra uno ante Roberto. Desde el segundo gol, poca historia. Abelardo pudo rotar y repartir minutos entre sus jugadores sin la urgencia del resultado. El Espanyol estuvo muy cerca de lograr un tercer gol que hubiese sido el premio gordo a un buen regreso. El equipo no falló en su primer partido y coge confianza de cara a los siguientes compromisos. El martes, nueva cita ante el Getafe.

rcdespanyol.com