La restauración, conservación y protección del 30 por ciento de la biodiversidad y la naturaleza generarían grandes beneficios económico financieros, pero se requiere una inversión aproximada de 140.000 millones de dólares en los próximos diez años, según un estudio elaborado por más de 100 expertos.
El nuevo informe independiente ‘Protección del 30 % del planeta para la naturaleza: costos, beneficios e implicaciones económicas’, publicado este miércoles, es el primer análisis de los impactos de áreas protegidas en múltiples sectores económicos, incluyendo la agricultura, la pesca y la silvicultura, además de la conservación de la naturaleza.
Quintuplicar beneficios con la protección de la naturaleza
El científico de National Geographic, Enric Sala, en la reserva oceánica de Galápagos. EFE/José Jácome/ARCHIVO“Por cada dólar invertido en la protección de la naturaleza supone un beneficio de 5 dólares”, ha señalado el oceanógrafo español Eric Sala, explorador residente de National Geographic Society y coautor del informe en una reunión digital.
“Esta inversión palidece en comparación con los beneficios económicos que brindarían áreas protegidas adicionales y el apoyo financiero mucho mayor que actualmente se brinda a otros sectores”, según Enric Sala, el autor de “The Nature of Nature: Why We Need the Wild“, que aparecerá en agosto.
“Invertir para proteger la naturaleza representaría menos de un tercio del monto que los gobiernos gastan en subsidios a actividades que destruyen la naturaleza. Representaría el 0,16 % del PIB mundial y requeriría menos inversión de lo que el mundo gasta en videojuegos cada año “, apuntó el oceanógrafo español.
Junto a Sala han intervenido Anthony Waldron, profesor de la Universidad de Cambridge y autor principal del estudio, y Rashid Sumaila, profesor y director de la Unidad de Investigación de Economía de la Pesca del Instituto de Océanos y Pesca de la Universidad de Columbia Británica.
Sumaila señaló que el océano “es como una cuenta de inversión: para protegerlo de lo desconocido e incognoscible, debe colocar parte de él en una cartera conservadora como una inversión de ‘día lluvioso’”.
Pero es necesario colocar “parte de esa cartera oceánica en áreas marinas protegidas, según Sumaila, quien añadió que el consejo general es que las personas de 30 años deben invertir el 30% de su cartera en una inversión de ‘día lluvioso’ ; las personas mayores deben aumentar este porcentaje según su edad. Solo con esta medida, se puede calcular que 30×30 es una cifra que se queda corta, porque el océano tiene mucho más de 30 años de existencia…”.
Aumentar las áreas protegidas aumentaría las ganancias económicas
El informe realizado por economistas y científicos descubre que la economía global se beneficiaría del establecimiento de áreas protegidas en tierra y mar mucho más amplias que las existentes actualmente.
Un bosque dañado por la sequía y los escarabajos de la corteza en el Ahrtal de Altenahr, cerca de Ahrweiler, Alemania. EFE/EPA/SASCHA STEINBACH/ArchivoAproximadamente el 15 % de la tierra en el planeta y el 7 % del océano tienen algún grado de protección, según un comunicado de la organización Campaign for Nature que trabaja con científicos, pueblos indígenas y una coalición de más de 100 organizaciones conservacionistas de todo el mundo.
El informe presentado hoy encuentra que las protecciones adicionales conducirían a un aumento de 250.000 millones de media en aumento de la producción económica anual y de 350.000 millones de media en servicios ecosistémicos mejorados anualmente en comparación con el statu quo.Para obtener estos beneficios de proteger el 30 % de la naturaleza hasta 2030, los expertos explican que se necesitan unas inversiones de 140.000 millones de dólares en la próxima década.
Actualmente, se invierten poco más de 24.000 millones de dólares por año en las áreas protegidas, según los autores del estudio.
En los últimos años, el sector de la conservación de la naturaleza ha sido uno de los sectores de más rápido crecimiento, según los autores, y se prevé que crezca de 4 a 6 % por año, en comparación con menos del 1 % para la agricultura, la pesca y la silvicultura, después de que el mundo se recupere de la pandemia COVID-19.
Beneficios para las personas y lucha contra el cambio climático
No obstante, los beneficios de la protección de las áreas naturales también redunda en importantes beneficios para la salud mental y física y reduce el riesgo de nuevos brotes de enfermedades zoonóticas como COVID-19, cuyo coste no se ha cuantificado aún a pesar de los gastos extraordinariamente altos de la pandemia.Según los autores, un estudio reciente estimó en 6.000 millones de dólares anuales los beneficios de las áreas protegidas basado en la mejora de la salud mental de los visitantes.
“Nuestro informe muestra que la protección en la economía actual genera más ingresos que las alternativas, y probablemente agrega ingresos a la agricultura y la silvicultura, al tiempo que ayuda a prevenir el cambio climático, las crisis de agua, la pérdida de biodiversidad y las enfermedades”, sostuvo Anthony Waldron, autor principal del informe e investigador centrado en el financiamiento de la conservación, la pérdida global de especies y la agricultura sostenible.Según Waldron, el aumento de la protección de la naturaleza es una “buena política para los gobiernos que hacen malabares con múltiples intereses. No se puede poner un precio a la naturaleza, pero los números económicos apuntan a su protección ”.
Los beneficios de esas inversiones “se verán más allá del 2030, pero es necesario emprenderlas ahora, no en 2029”, aseveró Waldron.
Proteger el 30 % de la naturaleza para 2030
Un hombre monta a caballo en el terreno donde antes se encontraba la laguna de Aculeo (Chile). EFE/ Alberto Valdes/ARCHIVO
La Campaign for Nature exige a los responsables políticos que se comprometan con objetivos claros y ambiciosos que está previsto se acuerden en la XV Conferencia de las Partes en la Convención sobre Diversidad biológica en Kunming (China), en 2021, con el objetivo de proteger al menos el 30 % de la biodiversidad del planeta para 2030.
Asimismo, trabajar de forma conjunta con los pueblos indígenas para garantizar el pleno respeto a sus derechos.
El documento mide, asimismo, los impactos financieros de las áreas protegidas en la economía global y los beneficios no monetarios como los servicios del ecosistema, incluida la mitigación del cambio climático, la protección contra las inundaciones, el suministro de agua limpia y la conservación del suelo.
El informe llega cuando la atención vuelve a un esfuerzo global importante para proteger al menos el 30% de la tierra y los océanos del planeta para 2030.
El Convenio de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica ha incluido este objetivo en su proyecto de estrategia de 10 años , que se espera sea finalizado y aprobado por los 196 partidos de la Convención en Kunming, cita que inicialmente debía realizarse este año.
La Campaña por la Naturaleza trabaja con científicos, pueblos indígenas y una creciente coalición de más de 100 organizaciones conservacionistas de todo el mundo que exigen a los responsables políticos que se comprometan con objetivos claros y ambiciosos que se acordarán en la 15a Conferencia de las Partes en la Convención sobre Diversidad biológica en Kunming. EFEverde