Costa Rica informó este miércoles que los turistas podrán compensar la huella de carbono generada en vuelos aéreos y viajes terrestres con el objetivo de apoyar una economía verde que promueve internacionalmente el país.
El Instituto Costarricense de Turismo (ICT) y el Fondo Nacional de Financiamiento Forestal indicaron en un comunicado de prensa que el objetivo es facilitar la captación de recursos financieros para el Programa Pago de Servicios Ambientales (PSA).
La iniciativa promoverá la plantación de árboles, protección de las cuencas hidrográficas, regeneración natural, así como de los sistemas agroforestales en las fincas.
“Este acuerdo invita a nuestros turistas a mitigar sus viajes y a contribuir así en la protección de bosques y la recuperación de cobertura forestal (…) Es un paso al frente de un turismo responsable”, afirmó el ministro de Turismo, Gustavo Segura.
Sostenibilidad ambiental, económica y sociocultural
Una lechuza en su nido en el Refugio de Vida Silvestre Caño Negro (Costa Rica), un área protegida de casi 10.000 hectáreas en el norte del país, con aves, caimanes y el prehistórico pez gaspar. EFE/Jeffrey Arguedas
El modelo de desarrollo turístico de Costa Rica está basado en la sostenibilidad, el cual incluye tres ejes fundamentales: la parte ambiental, económica y sociocultural, los cuales buscan generar bienestar a las comunidades respetando su identidad y donde el factor cultural es un elemento diferenciador.
El país centroamericano cuenta con un liderazgo mundial en energías renovables, impulsa un plan de descarbonización de la economía y cuenta con una protección del 26 % de su área boscosa.
Para el ministro Segura, se trata de un proyecto ambicioso porque Costa Rica es “percibida como una sociedad que honra la naturaleza en su territorio: protege, cuida y comparte, potencia el bienestar humano de sus ciudadanos, descritos como gente amable, hospitalaria y feliz”.
Según cálculos realizados por el ICT, con datos de visitantes del año 2018, asumiendo que solamente un 10 % de las emisiones calculadas fueran compensadas (476.541), se lograría una captación anual de 3.574.063 dólares (3,05 millones de euros) con lo cual se podría financiar más de millón y medio de árboles en sistemas agroforestales, unas 14.000 hectáreas.
“Este programa es un motor verde para la recuperación económica sostenible de Costa Rica. La llegada de visitantes al país beneficia al sector de ecoturismo y el dinero que ingresa por la compensación de sus emisiones fortalece la conservación forestal y a las familias que dependen de este incentivo”, dijo la ministra de Ambiente y Energía, Andrea Meza.
Para las autoridades costarricenses, es vital empezar a tomar medidas para atender las emisiones aéreas de los turistas y buscar beneficios adicionales para su compensación.
El Programa por Pago de Servicios Ambientales (PPSA) es un mecanismo de financiamiento para el manejo, la conservación y el desarrollo sostenible de los recursos del bosque y de la biodiversidad.
Entre 1997 y 2019, los programas del Fondo Nacional de Financiamiento Forestal han recuperado una cobertura boscosa de 1.311.764 hectáreas y de 2003 a 2019, fueron sembrados más de 8 millones de árboles en sistemas agroforestales. EFEverde