Podría decirse que todo en la naturaleza tiene un motivo de “ser” dentro del gran engranaje perfecto que forma. Confirmando el anterior axioma, el ser humano en ocasiones ha tomado equívocamente como plagas algunas especies, que de hecho, la ciencia ha comprobado que son benéficas.

Un ejemplo de lo anterior, es el hecho de que el investigador mexicano de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Francisco Delgado Vargas, en coordinación con el centro alemán Helmholtz, han descubierto en un estudio que la planta Typha domingensis es capaz de limpiar aguas residuales.

Este tipo de plantas, generalmente era retirada de los drenes (un tipo de salida de agua residual de cultivos), sin embargo, Delgado Vargas ha encontrado que esta es capaz de limpiar el agua hasta en el 98 por ciento la contaminación por enterobacterias.

“Las raíces de Typha domingensis siempre están inundadas, absorben nutrientes del suelo y liberan compuestos que ayudan a disminuir el impacto de organismos patógenos”, refirió el investigador para La Jornada.

Sobre la planta, Delgado advierte. “Estamos invadiendo los lugares donde este tipo de plantas se desarrollan, las eliminamos y no vemos el gran beneficio ecológico que nos brindan”.

Este descubrimiento puede servir como una estrategia futura para tratar las aguas residuales, sobre todo aquellas que contengan desechos fecales. Como si la respuesta se encontrara en la misma naturaleza, considerar las propiedades de algunas especies para regenerar los ecosistemas puede ser una tendencia que bien podría darnos una preciosa lección de la naturaleza como su propia heroína.

De Ecoosfera.com