(EFE).- Si la Cumbre de Cambio Climático de París logra concluir con un pacto, no sólo será una resolución de medio ambiente, sino también un importante acuerdo de salud pública, dada la inmensa repercusión que el calentamiento global tiene en el bienestar de las personas.

Esta es la opinión de la española María Neira, directora de Salud Pública y Medio Ambiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que concedió una entrevista a Efe durante la Asamblea Mundial de la Salud, que hoy comienza en Ginebra.

“Si en París se llega a un acuerdo, será el mayor acuerdo de salud pública que se podría conseguir. Las medidas contra el calentamiento global son una de las mejores herramientas de prevención primaria con las que contamos”, señaló Neira.

Los 195 Estados miembros de la Convención de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (UNFCCC) deberán negociar en diciembre en París un acuerdo global de lucha contra el cambio climático, que sustituirá al de Kioto.

“Estamos en un momento crucial donde en París este año se van a tomar decisiones sobre el cambio climático. Pero nos interesa muchísimo que el argumento salud esté dentro, porque todo lo que se decida contra el cambio climático en el fondo son medidas que van a tener repercusión en la salud pública”, insistió.

Según datos de la OMS, cada año siete millones de personas mueren a causa de la mala calidad del aire que respiran.

Un reciente informe publicado por la OMS revela que más de la mitad de la población mundial reside en urbes con índices de polución 2,5 veces mayores de los recomendados por el organismo.